Un panel de jueces rechazó este jueves una apelación del gobierno estadounidense, que argumentaba que los menores migrantes detenidos no requerían de jabón durante periodos cortos en custodia, de acuerdo con una antigua acta de conciliación.
Un panel de tres jueces de la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito de San Francisco desestimó la impugnación al fallo de una corte inferior de que las autoridades migratorias no ofrecieron a los niños condiciones seguras ni sanitarias, en apego a un acuerdo de 1997.
El gobierno de Estados Unidos había argumentado que las autoridades no estaban obligadas a proporcionar alojamiento específico, tal como jabón de baño, bajo los requisitos del acuerdo de que las instalaciones sean “seguras y sanitarias”, por lo que pidió la intervención del panel. Los jueces de apelación disintieron y rechazaron el caso del gobierno.
“Garantizar que los niños consuman alimentos comestibles, beban agua potable y sean alojados en instalaciones limpias, con baños higiénicos, que tengan jabón y pasta dental, y no se les prive del sueño es sin duda esencial para la seguridad de los menores”, escribió el panel.
El fallo se dio después de que durante una audiencia realizada en junio, un abogado del gobierno estadounidense sostuvo que el acuerdo era difuso y no necesariamente exigía que se les proporcionara a los menores de jabón y pasta dental durante las detenciones breves.
La jueza federal de distrito Dolly Gee en Los Ángeles determinó en 2017 que las autoridades habían violado el trato _ conocido como el acuerdo Flores_ después de que jóvenes migrantes detenidos en la frontera dijeron que habían dormido en celdas frías y sobrepobladas y se les brindaron alimentos inadecuados y agua sucia.
Desde entonces, los problemas en las instalaciones han persistido. Gee designó a un supervisor independiente para que evalúe las condiciones en que los menores son retenidos.