La población de adultos mayores en el mundo es cada vez más alta, en España según el Instituto Nacional de Estadística para el año 2033 supondrá más del 25.2%, estos pacientes son quienes en su mayoría ingieren con más frecuencia y cantidad medicamentos.
Ciertos medicamentos como (diazepam y lorazepam), algunos muy recetados para adultos mayores, se desaconsejan en población con más de 65 años porque en esta etapa de la vida son personas sensibles a los efectos adversos que pueden sufrir somnolencia excesiva y, como consecuencia de ello, caídas.
A mayor longevidad más enfermedades crónicas
Ser adulto mayor está asociado al aumento de enfermedades crónicas, limitación de la movilidad, funciones y morbilidad, esta situación representa un reto para los sistemas de salud del mundo dado que estos pacientes incrementan el uso de los servicios de salud y el consumo de medicamentos.
Polifarmacia
La Organización Mundial de la Salud (OMS) definió el uso simultáneo de múltiples medicamentos, cinco o más como polifarmacia. La ingesta de diferentes medicinas al mismo tiempo aumenta la probabilidad de que se produzcan interacciones farmacéuticas.
La polifarmacia se asocia con reacciones adversas a medicamentos, incremento de ingresos hospitalarios, delirium, caídas, discapacidad y mortalidad. Sin embargo, hay que tener en cuenta que el uso de varios medicamentos al mismo tiempo para un gran porcentaje de quienes los ingieren es necesario y beneficioso.
Medidas de prevención
La Organización Mundial de la Salud desarrolló un informe llamado Seguridad de los medicamentos en polifarmacia con el fin de proponer alternativas para lidiar con la problemática:
- Implantar revisiones periódicas de la medicación en pacientes polimedicados.
- Abordar la polifarmacia apropiada al inicio del tratamiento, durante la revisión de los medicamentos y en las transiciones entre equipos asistenciales.
- Permitir a los profesionales sanitarios y a los pacientes discutir temas relacionados con la polimedicación, lo que llama “cultura de seguridad”.
- Implantar políticas que apoyen el manejo apropiado de la polifarmacia y promuevan el trabajo multidisciplinar, eliminando barreras.
- Un enfoque centrado en las personas, revisando la medicación con los pacientes y/o sus cuidadores.
- Abordar problemas de estilo de vida durante el proceso de revisión de la medicación.
- Usar tecnologías apropiadas para reducir los daños relacionados con la medicación, mejorando la experiencia del paciente y la adherencia al tratamiento.
- Informar de incidentes con medicamentos, incluyendo reacciones adversas, hospitalización o asistencia al centro de salud primario debido a síntomas relacionados con su consumo.