El uso excesivo de los antibióticos en la actual pandemia estaría alimentando la mutación de la súper gonorrea, lo que le está proporcionando un “entorno ideal para propagarse”, señaló la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La cepa de esta enfermedad de transmisión sexual (ETS) que se ha revelado resistente a los antibióticos, iría en aumento, según advirtió ayer al diario The Sun un portavoz de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“El uso excesivo de antibióticos en la población puede impulsar la aparición de resistencia a los antimicrobianos en la gonorrea”, dijo el experto, quien puso como ejemplo la azitromicina, un antibiótico común para el tratamiento de infecciones respiratorias que se utilizó para el tratamiento del covid-19 al inicio de la pandemia.
Debido a la actual emergencia, señaló el portavoz, los servicios de enfermedades de transmisión sexual han sido interrumpidos lo que ha elevado los casos de estos males no diagnosticados y, más aún, de personas que se automedican con los consecuentes riesgos.
“Esta situación puede impulsar la aparición de resistencia en la gonorrea, incluida la súper bacteria de la gonorrea (súper gonorrea) o la gonorrea con un alto nivel de resistencia a los antibióticos recomendados actualmente para tratarla”, continuó.
Las cepas resistentes de gonorrea, según el experto, constituyen un “desafío crítico” para los esfuerzos de prevención y de control de las enfermedades de transmisión sexual en el mundo, pues el uso excesivo de antibióticos por la pandemia ha alimentado la mutación y propagación de la gonorrea.
De no tratarse, la súper gonorrea puede multiplicar por cinco la transmisión del virus de inmunodeficiencia humana (VIH) y las infecciones oculares que pueden provocar ceguera.
La causa
La gonorrea tiene como único origen el contacto sexual de riesgo, si esto se produce durante un embarazo, existe riesgo de parto prematuro o infección en la sangre, las articulaciones o en los ojos del bebé.
Esta bacteria busca siempre zonas húmedas y cálidas, como las zonas genitales y la boca, y es más frecuente si se mantiene relaciones sexuales con diferentes parejas sin protección o se consume drogas y alcohol en exceso.
Tener relaciones íntimas con una persona contagiada es un foco potencial de desarrollo de la gonorrea.
De no atenderse adecuadamente, la enfermedad puede dejar secuelas permanentes como infertilidad, dificultad para embarazarse o desarrollar embarazos ectópicos (de riesgo) o dolor pélvico crónico.
Síntomas
En caso de gonorrea hay que diferenciar los síntomas que puede presentar el hombre a los que se conocen en la mujer, sobre todo teniendo en cuenta que ellas pueden ser completamente asintomáticas y ejercer de difusoras de la bacteria.
La bacteria causante de la gonorrea tiene un periodo de incubación de entre 2 a 14 días. En este tiempo, es factible que el hombre perciba molestias leves en la uretra.
Si pasados estos días las molestias continúan y se acompañan no solo de una amplificación sino de una exudación de pus, estaríamos ante una señal más inequívoca de que podría estar contagiado.
También es común entre los hombres que aumente la sensación de ganas de orinar sin que se produzca micción.
Cuando se expulsa pus, habitualmente los labios del meato u orificio de la uretra se muestran enrojecidos e inflamados. Si se mantienen relaciones sexuales con un hombre o ha habido penetración anal, también pueden darse estos síntomas en el ano.
La práctica de sexo oral también tiene consecuencias, ya que aparecen llagas o se expulsa supuraciones procedentes de la faringe, que es donde agarra la bacteria.
En mujeres
A diferencia del hombre, en el caso de la mujer el periodo de incubación de la bacteria se estima entre 7 a 21 días, mostrando antes algunos de los síntomas de la infección. Así, es común en las mujeres que aparezcan más ganas de orinar o se incremente el volumen y la exudación de moco vaginal. Si se ha practicado sexo anal, la zona del ano tendrá molestias y también habrá exudado de pus, siendo incluso dolorosa la defecación o la práctica de sexo.
Cuando se ha practicado sexo oral de riesgo, el gonococo en la mujer tiende a ser asintomático, mostrando únicamente un ligero enrojecimiento e inflamación de las amígdalas.