Estudiantes de la Universidad de Guanajuato (UG) realizaron una manifestación silenciosa para exigir justicia por el asesinato de su compañero Ángel Yael y para la alumna Alejandra, lesionada por elementos de la Guardia Nacional que les dispararon el miércoles en la comunidad El Copal, en Irapuato, Guanajuato.

Los universitarios se concentraron esta mañana en la Unidad de Ciencias de la Vida de la UG, y junto a las letras emblemáticas de la institución colocaron decenas de veladoras encendidas; hicieron un minuto de silencio y se convocaron a cuidarse entre sí. “En memoria del ingeniero Ángel”, escribieron en arreglos florales.

Expresaron tristeza, dolor e indignación por la acción de los elementos federales, que “mataron” a Ángel Yael Ignacio Rangel , de 19 años, estudiante becado de la licenciatura de Agronomía y que lesionaron de gravedad a su compañera Edith Alejandra, de cuarto semestre, por la que pidieron oraciones por su salud.

Los hechos

La Guardia Nacional confirmó el miércoles que un elemento de esta corporación se vio involucrado en un incidente en el que un estudiante de la Universidad de Guanajuato murió y otra estudiante resultó lesionada.

En un comunicado, informó que los hechos ocurrieron cuando guardias nacionales  realizaban reconocimientos disuasivos sobre el ducto de Pemex “Salamanca-León”, en inmediaciones del poblado “Ex Hacienda el Copal”, en el municipio de Irapuato, Guanajuato, en el marco de la Estrategia Nacional de Seguridad Pública, la política de Cero Impunidad del gobierno federal y el Plan Conjunto del Gobierno de la República para combatir el robo de hidrocarburo.

Indicó que el personal de la Guardia Nacional observó a dos vehículos estacionados en un camino de terracería sin poder identificar a sus ocupantes, quienes al percibir su presencia procedieron a retirarse del lugar de manera precipitada, motivo que provocó desconcierto e incertidumbre entre los miembros de la corporación.

Derivado de lo anterior, explicó, un elemento de la Guardia Nacional descendió del vehículo en el que se transportaba y, de forma unilateral, accionó su arma de cargo en contra de las camionetas que se retiraban del lugar, resultando una persona fallecida y otra lesionada.

La Guardia Nacional afirmó que tras los hechos, el citado agente fue puesto a disposición de las autoridades competentes de Guanajuato.

El gobernador, Diego Sinhue Rodríguez, dijo que los hechos fueron a consecuencia de disparos “en un uso desproporcionado de la fuerza por parte de un elemento de la Guardia Nacional”.

Instruyó a funcionarios de su gabinete para que acompañen a la familia y den seguimiento al caso.

Testimonios

Algunos alumnos mencionaron que ayer un grupo de alrededor de doce estudiantes de cuarto semestre de la licenciatura de Agronomía fueron perseguidos sin justificación por los elementos de seguridad federales cuando salían de una convivencia en una camioneta.

Comentaron que en la unidad iban cuatro estudiantes a bordo, al momento de la agresión de la Guardia Nacional.

Él no estaba en el momento ni lugar equivocado”, expresaron en la manifestación. Estudiantes de otros campus de la máxima casa de estudios del estado  replicaron la exigencia de justicia: “Ni una abeja menos, justicia para Ángel”.

Los alumnos rindieron un minuto de silencio, aplausos y externaron porras para su compañero.

El rector de la Universidad de Guanajuato, Luis Felipe Guerrero Agripino, se unió a la exigencia de justicia, porque lo que sucedió fue “un acto homicida”, que afecta a toda la comunidad universitaria y a toda la sociedad.

El rector dijo que se pedirá que la queja por la agresión a los universitarios se eleve a la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), y que la Carpeta de Investigación por el homicidio y lesiones  contra los alumnos se trabaje en esta entidad.

El rector informó que las clases en el Campus Copal están suspendidas y  continuarán cuando la comunidad universitaria lo decida y se tengan las condiciones de seguridad propicias para que se puedan reanudar.

Compañeros recordaron a Ángel, alumno del cuarto semestre de la carrera de agronomía, como un joven “increíble y era muy alegre, era un chavo increíble y estudioso”.