Una mujer sin hogar conocida como Marina sufrió la amputación de ambas piernas después de ser atacada por ratas mientras dormía en el corral de ovejas de una granja en Rusia. Marina, de unos 60 años, fue descubierta por un transeúnte y llevada de urgencia al hospital, donde los médicos determinaron que tenía gangrena avanzada, lo que hizo necesario amputar ambas piernas.
Actualmente, Marina se está recuperando en un refugio para personas sin hogar, aunque su futuro es incierto. Las autoridades locales han considerado cerrar este refugio debido a preocupaciones de seguridad, especialmente por el riesgo de incendios. Marina carece de documentos y vínculos familiares, dependiendo completamente del refugio para recibir atención diaria.
Olga Shiryaeva, quien dirige el refugio Helping Hand, ha mencionado que la dependencia de Marina al alcohol ha contribuido significativamente a la ruptura de sus relaciones, incluyendo la pérdida de la custodia de sus hijos. A pesar de su difícil situación, Marina sigue luchando contra su adicción al alcohol y continúa fumando.
Este caso destaca el grave problema del alcoholismo en Rusia, que es un creciente desafío social. Según datos de Statistica, en 2021 había casi 11,300 personas sin hogar en Rusia, y la tasa de alcoholismo sigue en aumento. En 2023, The Moscow Times informó que los rusos compraron 2,300 millones de litros de alcohol fuerte, superando el récord anterior de 2,200 millones en 2022.
