La ministra de Cultura de Panamá, Giselle González Villarrué, aseguró que hay optimismo ante la posibilidad de que la Ruta Colonial Transístmica, un conjunto de construcciones históricas que unen al Pacífico con el Caribe panameño, sea incluida en la lista de Patrimonio Mundial de la Unesco.
«Entregamos el dossier a la Unesco y ya hemos recibido un primer borrador bastante optimista, en el que Unesco ya reconoce dos de los tres criterios» propuestos por el país para que la Ruta sea reconocida como Patrimonio Mundial, declaró la ministra a EFE, una decisión que podría tomarse el mes que viene.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, o Unesco, reconoció a través de Icomos, el organismo encargado de evaluar las candidaturas a la Lista de Patrimonio Mundial, que Panamá logró demostrar dos de los tres criterios propuestos por el país para concretar la inscripción de la Ruta.
Las inscripciones patrimoniales de valor universal excepcional «se hacen con un solo criterio, Panamá tiene dos, entonces hay muchas posibilidades», añadió González Villarrué, quien entregará el cargo el próximo 30 de junio, cuando finaliza la actual Administración panameña liderada por Laurentino Cortizo (2019-2024).
La Ruta Colonial Transístmica incluye el Sitio Arqueológico de Panamá Viejo y el Distrito Histórico de Panamá (Patrimonio Mundial desde 1997), las Fortificaciones de la Costa Caribe de Panamá: Portobelo y San Lorenzo (en la lista del Patrimonio en Peligro desde 2012), y los caminos coloniales que los unen: el Camino de Cruces y el Camino Real.
La estrategia del Estado panameño para esta inscripción ha sido presentar una nominación por fases, la primera de ellas entregada en febrero de 2023 a la Unesco.
Esto luego de que en 2019 el Comité del Patrimonio Mundial del organismo decidiera posponer la inscripción de la Ruta, a la espera de que la nación centroamericana entregara una propuesta revisada que cumpliera con una serie de recomendaciones.
La fase uno está compuesta por el castillo de San Lorenzo, el Camino de Cruces, el Sitio Arqueológico de Panamá Viejo y el Casco Antiguo de la Ciudad de Panamá, mientras que en su fase dos incluye las fortificaciones de Portobelo y el Camino Real.
Panamá está «a un paso» de lograr la inscripción
El arquitecto panameño Daniel Young-Torquemada, miembro de Icomos Panamá, afirmó en una entrevista con EFE que el país «está a un paso de que el sitio», es decir, la fase uno de la Ruta Colonial, «sea inscrito» en la lista de Patrimonio Mundial.
Young-Torquemada y la también arquitecta María Isabel Arrocha coincidieron en que esta inscripción pudiera darse efectivamente en la 46 reunión del Comité del Patrimonio Mundial, que tendrá lugar del 21 al 31 de julio en Nueva Delhi, India.
En el borrador de Icomos, se recomienda al país «cumplir una serie de recomendaciones, que son menores y administrativas, antes de la inscripción» y Panamá tiene la vía diplomática para lograr efectivamente que esta ocurra en la reunión de Nueva Delhi, explicaron los expertos.
El país puede tomar el expediente con las recomendaciones y trabajarlas para luego volverlo a presentar un proceso conocido como ‘Refer back’, pero «mi recomendación sería que el Gobierno hiciera todo lo posible para que el sitio pueda ser inscrito en la próxima reunión del Patrimonio Mundial» en la India, «porque todas las condiciones están dadas», dijo Young-Torquemada.
«En esa reunión (en Nueva Delhi) Panamá pudiera tomar la decisión de explorar los mecanismos diplomáticos idóneos y administrativos que permite la convención para que el Comité pudiera plantearse la posibilidad de inscribir el sitio ya, habida cuenta de que Panamá se comprometa a cumplir con las cosas que están pendientes», añadió.