En una contundente declaración durante el Foro de las Islas del Pacífico en Tonga, el Secretario General de la ONU, António Guterres, advirtió que los grandes contaminadores deben actuar para reducir las emisiones o enfrentarán graves consecuencias globales. Guterres subrayó que la región del Pacífico es la más vulnerable al cambio climático y destacó la injusticia que sufren las pequeñas islas, que, aunque no contribuyen significativamente al problema, enfrentan sus efectos de manera exacerbada.

Durante su discurso, Guterres hizo hincapié en la creciente amenaza del aumento del nivel del mar, afirmando que «los mares nos darán nuestro merecido». Esta advertencia se produjo en el contexto de la publicación de dos informes de la ONU que detallan cómo el incremento del nivel del mar está afectando de manera desproporcionada a las naciones insulares del Pacífico.

El informe de la Organización Meteorológica Mundial señala que el Pacífico enfrenta un triple desafío: un aumento acelerado del nivel del mar, el calentamiento de los océanos y la acidificación de los mares debido a la absorción de dióxido de carbono. Guterres destacó que la principal causa de estos problemas son los gases de efecto invernadero, derivados en gran parte de la quema de combustibles fósiles.

El Secretario General también señaló las fallas del sistema financiero internacional para apoyar adecuadamente a los pequeños estados insulares en desarrollo, citando la burocracia y la falta de urgencia como obstáculos importantes. Guterres insistió en que es crucial que los grandes emisores, como Australia, tomen medidas decisivas para reducir sus emisiones y evitar que el calentamiento global supere el umbral crítico de 1,5 °C establecido en el Acuerdo de París.

“Es hora de decir ‘basta’”, afirmó Guterres, subrayando la necesidad urgente de acción para prevenir un colapso climático irreversible.