Martín Borrego Llorente renunció a su cargo como Coordinador de Contacto con la Ciudadanía en la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), después de que se revelara una investigación periodística que lo vinculaba con el uso indebido del Museo Nacional de Arte (Munal) para celebrar su boda, cuando aún trabajaba en la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).
En su carta de renuncia, el exfuncionario explicó que, aunque el evento fue de carácter privado, y que tanto la solicitud como los gastos asociados al mismo fueron cubiertos con recursos personales, reconoció que su solicitud de usar el espacio del museo a través de un correo institucional fue impropia. Además, admitió que la gestión del evento se realizó sin el conocimiento de la institución.
Borrego Llorente, quien también se desempeñaba como jefe de Oficina en la SRE en ese momento, afirmó en su renuncia: “Este actuar no fue correcto para un funcionario público ni digno de la confianza que depositó en mí. Lamento profundamente haber faltado a su confianza y que se vea involucrada en este episodio”.
La revelación se dio a conocer a través de una columna publicada en El Universal por el periodista Claudio Ochoa, titulada «La (no) boda fifí en el MUNAL». En su artículo, Ochoa expuso que el ex funcionario habría fingido la organización de un evento diplomático, específicamente el 89 aniversario de las relaciones diplomáticas entre México y Rumania, para poder realizar su boda en dicho espacio.
En respuesta a este escándalo, la Secretaría de Relaciones Exteriores indicó que se ha iniciado una investigación para determinar si hubo un uso indebido de los espacios públicos en el evento. La SRE subrayó que este tipo de situaciones requieren un análisis detallado para esclarecer los hechos y, en su caso, tomar las medidas pertinentes.