En medio del brote de sarampión que afecta a Texas, en el que se han contagiado al menos 146 menores, de los que uno falleció, padres estarían organizando deliberadamente “fiestas de sarampión”.

Lo anterior, para que los pequeños se contagien con la intención de desarrollar una inmunidad natural.

Así lo denunció Ron Cook, director de salud del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas. El médico condenó esta práctica al tiempo de calificarla como “necedad”. Además, advirtió sobre los riesgos graves del virus.

“Hay resultados severos como la neumonía o la muerte. Hay encefalitis o inflamación del cerebro. Aún más raro, pero puede suceder… años después de desarrollar sarampión, se puede obtener lo que se llama panencefalitis esclerosante subaguda, que es fatal. Es un efecto secundario conocido de haber tenido sarampión”, destacó.

No hay posibilidad de predecir complicaciones

En ese sentido, señaló que no hay posibilidad de predecir quién puede desarrollar complicaciones tras contagiarse en las “fiestas de sarampión”. Por ello, pidió no realizarlas.

Ante el incremento de casos, el secretario de Salud de Estados Unidos, Robert F. Kennedy Jr., anunció el envío de 2 mil dosis de la vacuna MMR a Texas. Asimismo, indicó que éstas fortalecen la inmunidad colectiva.

Es importante señalar que el sarampión se transmite por el aire, a través de la tos, estornudos o la respiración. Aunque afecta principalmente a niños, también se contagia a adultos y personas con sistemas inmunológicos comprometidos.