El gobierno de Estados Unidos, a cargo de Donald Trump, reducirá servicios en diversos idiomas para las personas que no dominen el inglés, lo que dificultará el acceso a salud o justicia para extranjeros.

Así lo dio a conocer el Departamento de Justicia tras un decreto firmado por el mandatario; y es que en marzo pasado declaró al inglés como idioma oficial.

Según el documento emitido por las autoridades, las agencias federales realizarán un inventario completo de todos los servicios existentes que no sean en inglés; también, eliminarán gradualmente las ofertas multilingües innecesarias.

Si se considera necesario un programa multicultural, la agencia debería incluir una nota clara que indique que el inglés es el idioma oficial del gobierno, indicó.

Priorizarán recursos al dominio del inglés

Pese a ello, afirmó que “deja espacio para la diversidad lingüística” en los ámbitos privados y comunitarios; pues debe priorizar los recursos federales para el dominio del idioma oficial. Esto, con el fin de empoderar a los estadounidenses y fortalecer la unidad cívica.

Es importante mencionar que, en el 2000, el entonces presidente Bill Clinton ordenó a las agencias federales asegurarse de que sus programas fuesen accesibles a todas las personas. Esto, basado en una ley de derechos civiles que prohíbe la discriminación por motivos de origen.

Sin embargo, desde el inicio de su segundo mandato, Trump se ha mostrado intransigente con los extranjeros. Sus políticas han afectado no solo a los migrantes indocumentados; continúa imponiendo trabas para que foráneos trabajen o estudien en Estados Unidos.