La Fiscalía General de la República (FGR), en coordinación con el Gabinete de Seguridad, encabezó diversos operativos en Sinaloa durante los primeros días de diciembre, que culminaron con el aseguramiento de más de una tonelada de droga y la detención de varios presuntos traficantes. Las acciones se desarrollaron en Los Mochis, Culiacán y Mazatlán, afectando económicamente al Cártel de Sinaloa con pérdidas millonarias.

De acuerdo con un comunicado oficial del titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, en Los Mochis se detuvo a dos personas que transportaban 320 kilogramos de metanfetamina en un tractocamión con caja refrigerada. La droga estaba oculta en costales que simulaban contener sulfato de amonio, un fertilizante agrícola.

En otro operativo realizado en Culiacán, tres personas fueron detenidas y se aseguraron 39 millones de pesos en fentanilo. Las autoridades revisaron dos inmuebles donde localizaron un arma larga, cartuchos, cinco kilos de fentanilo, 250 litros de sustancias químicas y una máquina para confección de pastillas.

El 1 de diciembre, en el Recinto Portuario de Mazatlán, se decomisaron 605 kilogramos de metanfetamina y 21 kilos adicionales de cocaína, fentanilo y otras drogas. El conductor del tractocamión fue detenido y se incautaron 339 cajas con paquetes de metanfetamina, además de otros cargamentos con diferentes narcóticos. La afectación económica contra el narcotráfico se estimó en más de 282 millones de pesos.

Como parte de la Estrategia Nacional de Seguridad, el Ejército Mexicano y corporaciones federales desmantelaron siete centros de concentración de precursores químicos en Culiacán y Cosalá. En estas acciones se aseguraron 5,650 litros de sustancias químicas, un reactor de síntesis orgánica y dos condensadores, utilizados en la elaboración de drogas sintéticas. El golpe representó pérdidas superiores a 113 millones de pesos para el Cártel de Sinaloa.