Reestructurar el servicio de parquímetros para hacerlo más eficiente o retirar los aparatos, reclaman comerciantes del Centro Histórico de Pachuca, los que consideran que son múltiples las deficiencias conque operan, y por tanto, desalientan a los pachuqueños a visitar la zona.
Marcos Muñoz, secretario de la Asociación de Comerciantes y Vecinos del Centro Histórico (Acocepa), afirmó que el comercio en la zona está muy insatisfecho con el servicio de parquímetros que ofrece la empresa Movipark y rechazan el mismo.
“O modernizan el servicio o quitan los aparatos”, es la postura del comercio, citó el empresario, con diversos negocios en la zona, los que considera, afectan la actividad comercial de la zona.
“La gente se queja de que los aparatos solo aceptan monedas y no dan cambio, así que si no se les deposita la cantidad exacta, se queda el aparato con dinero del usuario”, citó.
Resulta especialmente molesto para los usuarios, y para el comercio también, que los aparatos no acepten billetes, lo que toma de sorpresa a personas que no es esperan esta situación.
“Las personas comienzan a buscar desesperadamente cambio, monedas, pero son tantos que es imposible para los comerciantes estarles cambiando billetes a todo el que lo pide”.
Se requiere entonces, consideran los comerciantes, que se modernicen los aparatos para aceptar billetes y dar cambio, como en los parquímetros que operan en otras ciudades en el país.
Es indispensable que la “gente de naranja” –los empleados que atienden estos aparatos-, cuenten con terminales que les permitan cobrar, y entregar recibo oficial, a los clientes que multen, como ocurre también en otras ciudades.
“Una persona a la que se le venció el tiempo, pues además no hay una tolerancia mínima, le colocaron un inmovilizador en su auto y perdió toda la mañana tramitando el pago de multa y la liberación del vehículo, difícilmente vuelve al centro de no serle estrictamente necesario”, afirmó Muñoz.
Reclaman además los comerciantes una intensa campaña de difusión sobre estos aparatos y la normatividad conque operan, “pero no solo para los usuarios, sino para su propio personal, que parece desconocer estas normas”.
Hizo notar que aunque los parquímetros no deben funcionar los domingos y días festivos, “es frecuente que los empleados que los atienden quieran mutar, e incluso lo han hecho, a personas que no pagan parquímetro en esos días. O son ignorantes o buscan sorprender a los automovilistas.”
Se quejan además los usuarios de las distancias que existen entre las máquinas para pagar el servicio, “que son cortas para los jóvenes, pero muy largas para personas de la tercera edad, discapacitados o con mucha prisa. Deben colocarse más de ellas, se reclama”.
El comercio del centro histórico es receptor de las quejas de los automovilistas por el mal servicio de parquímetros en la zona, “y de plano exigen que sean modernizados o que los retiren”, concluyó el empresario.
