Incremento en las ventas del mil por ciento ha disparado la tendencia ecologista de sustituir bolsas de plástico no biodegradable de bolsas ecológicas, que obsequiadas o en venta, a bajo precio, permiten además a los comercios publicitarse.

Anteriormente me pedían 50, si mucho, 100 bolsas; ahora los pedidos son por millares”, aseguró Katia Ángeles, de la empresa Ecomundo, que con bolsas para mandado, para pan, para llevar pequeñas porciones de granos, frutas o verduras, para carne y carnes frías, responde a las necesidades del mercado.

Sus bolsas ecológicas, hechas a partir de telas recicladas, tienen una duración promedio de dos años, pueden lavarse y secarse en máquinas, y al desecharse, son degradables en poco tiempo.

Ya la tendencia por sustituir el plástico común por materiales biodegradables viene de tiempo; sus bolsas ya eran comercializadas en el mercado de Pachuca y otras ciudades en el estado.

Sin embargo es a partir de que entrara en vigor la prohibición de dar bolsas de asas de plástico en los supermercados, cuando comienza a crecer la demanda de estas bolsas ecológicas.

Yo les hago notar a las empresas que no se trata de un gasto sino de una inversión; al entregar las mercancías en estas bolsas biodegradables satisfacen al cliente y si además les imprimen publicidad, se publicitan”, aseguró la joven empresaria.

En el caso de los pequeños comercios, a los que resulta difícil absorber el costo de estas bolsas, “yo les sugiero que las pongan en venta, sacrifiquen la ganancia o solo les ganen uno o dos pesos, para que los clientes las encuentren baratas, más atractivas.

Hasta ahora muchos consumidores portan ya sus bolsas ecológicas cuando van de compras, “pero también en muchas ocasiones salimos del trabajo, no teníamos pensado realizar compras y no llevamos la bolsa, así que nos es difícil salir de una tienda cargando latas, latitas, envases y demás, y agradecemos el que se tengan bolsas  que nos obsequien o vendan.

Hizo notar que en los supermercados, donde inició la prohibición de entregar bolsas de plástico común, la venta de bolsas ecológicas ha sido fabulosa.

 

Bolsitas para todo

Pero además la tendencia indica que dejarán de usarse también las tradicionales bolsas de plástico para llevar pequeñas cantidades de verduras, hortalizas, frutas, granos, etcétera, de las que aún se ofrecen en los supermercados.

Para quienes ya no quieren recibir tampoco estas bolsas, Karia Ángeles ha comenzado a producir bolsitas pequeñas con jareta para llevar un kilo o menos de granos, además de pequeñas porciones de frutas y verduras, que también comienzan a llamar la atención en el mercado.

Afortunadamente estamos cobrando conciencia del daño que causa el plástico a nuestro planeta, y llegará el día en que, como en Europa, rechacemos aquellos productos que vienen empacados en plástico no biodegradable y favorezcamos las marcas que utilicen materiales ecológicos en sus envases.