¡Sí, claro! ¡Por supuesto! Es lo que responde un grupo de personas a quienes se les pregunta si saben usar un condón -masculino o femenino- a la hora de tener una relación sexual.

No obstante, cuando el personal del programa de prevención de VIH y otras enfermedades de transmisión sexual en Puebla, les dicen a ese grupo de chicos y chicas que muestren cómo colocar un preservativo mediante un dildo o modelo de vagina; la realidad es que desconocen cómo colocarlo.

Omar Romero Medina, responsable de prevención del programa estatal de la Secretaría de Salud, detalla a Síntesis que cuando se le pregunta a un grupo de 10 personas si saben cómo utilizar el condón, la mayoría dirán que de cierta forma o sí lo han utilizado pero no con todas las características que deberíamos de ver.

Como primer punto que se debe de tomar en cuenta al utilizar un insumo de esta naturaleza es: revisar que el empaque esté en buenas condiciones, que se mantenga una burbuja de aire, y la fecha de caducidad; se recomienda que por lo menos tenga 6 meses previos a utilizarlo, porque quizá con el paso del tiempo el lubricante puede estar seco o el condón ya está viejo.

Otra característica: las relaciones sexuales deben ser en un lugar iluminado, más si es tu primera relación, porque se verá cuál es el derecho o el revés del preservativo, incluso con la luz encendida te permite ver si la pareja no tiene algún tipo de lesiones.

“Son ese tipo de tips, desde cómo utilizarlo, cómo abrirlo, porque es algo muy sencillo pero desconocemos, qué no hacer y todo lo relacionado”, precisa.

Aunado a ello, el especialista destaca que cuando se le habla a la población de un condón femenino, todavía es más complicado, y no está bien posicionado en la sociedad para que lo use.

El condón interno (termino correcto) va en la vagina.

“Entonces la idea es darles información de primera mano, fidedigna y que puedan utilizarlo y saber cómo utilizarlo”, acentúa el especialista.

Agrega que cuando van a las escuelas, la mayoría de los jóvenes dicen que un preservativo lo guarda en la cartera, cuando en realidad eso es incorrecto. “Entonces quitamos ciertos tabús para que no se lleve en la cartera, porque ahí se te puede romper, dañar, les explicamos dónde lo pueden guardar, por ejemplo en una caja de cigarros, cerillos, o de medicamentos. Todo ese tipo de tips que la gente desconoce pues se los decimos”, puntualiza.

Y es que el experto revela que la renuencia de las personas para no utilizar preservativos se deriva en parte del posicionamiento de no saber cómo utilizarlo en realidad.

Mercadotecnia engañosa

También, el responsable del programa de prevención de VIH y otras enfermedades de transmisión sexual de la Secretaría de Salud, revela que han proliferado una serie de preservativos de colores o de sabores, sin embargo –aclara- muchos son solamente para el acto erótico, el preámbulo, pero no para penetración.

“Lo que les recomiendo es que lean el condón para checar con qué finalidad está creado: algunos dicen que son para el erotismo, pero no para penetrar”, subraya.

Algunos de estos condones contienen químicos que hacen que tengan sabor o color, pero que fácilmente se pueden romper.

Reactivos al VIH

En cuanto a la campaña preventiva de VIH, y la unidad móvil que recorre la ciudad, Romero Medina comenta que en su mayoría se enfocan en lugares como el Centro,
Periferia, zona norte, pegada a la CAPU, y de Amalucan, la zona Militar; puntos que son de alta cantidad de encuentros sexuales.

Informa que, dependiendo la población y los lugares de encuentros sexuales, es baja el acercamiento de la gente a las unidades móviles, aunque hay alta posibilidad de encontrar una persona reactiva en cuanto al VIH.

“En algunas poblaciones hacemos 10 pruebas y salen 3 reactivas a VIH, y en población en general hacemos 100 pruebas y apenas salga 1 o ninguna; dependiendo la población es el riesgo sobre todo tiene que ver las practicas sexuales”, matiza.

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