El debate del lunes pasado organizado por Jacinto Herrera, presidente del IEE, entre candidatos al gobierno del estado de Puebla es un buen ingrediente para que los electores analicen las propuestas, fortalezas y debilidades de los cuatro contendientes.

Queda claro entonces que:

  1. Martha Erika Alonso dio muestra de estar preparada para dar la batalla por la gubernatura de Puebla.
  2. Que Miguel Barbosa tiene amplia capacidad para no perder el control y para mostrarse más allá del bien y del mal pese al cúmulo de ataques, pero sin poder conectar emocionalmente con el electorado – a decir de la encuesta de Massive Caller.
  3. Que Enrique Doger está jugando su propio juego, e intentó demostrar que no va en acuerdo con el morenovallismo en esta elección.
  4. Que Michel Chaín tiene energía juvenil que le permite ir sin corbata y hacer chistes contra Barbosa.

Pero más allá de ello, el postdebate lo ganó Martha Erika con la encuesta de Massive Caller, que la puso a la cabeza de manera contundente con ventaja de 10.5%.

Ayer Coparmex presentó una encuesta, en contraparte, en la que asegura que la ventaja de siete puntos entre los candidatos es para Miguel Barbosa.

La encuesta no tuvo tanto eco como la de Massive Caller por la oportunidad con la que llegó.

Más allá de cuál encuesta está en lo cierto, lo que me parece relevante es que todos saben que ésta es una lucha compleja para todos los partidos por el efecto AMLO. Para nadie es un secreto que los estrategas han operado para frenar el efecto de López Obrador en las elecciones locales del país coincidentes con la federal.

Y Puebla no es la excepción.

Por eso es que confirmo el planteamiento que he hecho en toda la campaña: habrá voto diferenciado.

Después de ver el debate estatal antier y después de ver el debate nacional hoy habrá mucha gente que decida ratificar su voto anti PRI y que pese a ello cruce diferentes logotipos a Morena en las elecciones estatales.

Por ejemplo, lo apretado de las elecciones en Veracruz pueden darle al PAN la gubernatura aunque la presidencia sea para Morena.

Así puede ocurrir en Puebla. Así lo sugieren el análisis de las encuestas, de los votos duros, de los márgenes que dará la operación electoral del Día “D” y otras variables no técnicas sino más bien políticas.

Es relevante pues, ver quién gana el postdebate presidencial de este martes en el que poco modificará la percepción de los debatientes en Mérida, Yucatán.

Gracias y nos leemos el viernes.

Twitter: @erickbecerra1

Facebook: @erickbecerramx

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