El Instituto Miguel de Cervantes presentó el proyecto educativo que ha impulsado este recinto educativo, y que por 14 años se ha desarrollado con el fin de lograr la formación integral de los educandos.
“Este es un proyecto que busca la formación integral, impulsando no sólo lo intelectual sino también lo cultural, lo artístico, lo técnico, espiritual y deportivo; por lo tanto, todo tiene importancia dentro del aprendizaje y es fundamental la participación de las familias, que cumplen un rol principal en la educación de los niños”, así lo dio a conocer el padre Miguel Romel Ortiz Flores, director general.
Acompañado del cuerpo docente de la institución, padres de familia y empresarios de la zona se llevó a cabo la presentación de este modelo pedagógico, denominado Pierre Faure, el cual busca formar personas que sean capaces de ponerse al servicio de los demás, no sólo con su capacidad intelectual, sino precisamente entregándose con toda su persona en el servicio que cada uno desempeñe.
Esta es una escuela de vanguardia en la zona urbana de Puebla, y oferta desde preescolar hasta preparatoria, ofreciendo como garantía una atención personalizada, con salones con poco menos de 20 estudiantes y un entorno en el que los estudiantes puedan formarse integralmente para que sean creativos y decidan por sí mismo. Esta formación integral incluye lo físico, lo artístico y lo cultural y sobre todo, la formación humana y espiritual además de lo académico e intelectual.
«En el instituto se cuenta con amplias áreas verdes, salones interactivos, canchas deportivas, comedor escolar, capilla, hermosas instalaciones, actividades de formación humana y espiritual, sistemas de seguridad”
«En este colegio es importante la excelencia académica pero lo que buscamos es está formación integral desde el corazón de estos pequeños, que las familias nos las encomiendan ya que pasan más de 9 horas diarias y existe la posibilidad de crear un espíritu».