La designación de Guillermo Pacheco Pulido como gobernador interino de Puebla envía la señal de una administración pública encabezada por un hombre de experiencia que apostará a la unidad, pero que también debe corregir el rumbo en torno a los pendientes que enfrenta la entidad, estimó el presidente de Sindicato Nacional de Empresarios en Puebla (Sindemex) Puebla, Francisco Romero Serrano.
Recalcó que para alcanzar la unidad se requiere del diálogo y la construcción de consensos, pero también corregir el rumbo respecto a una serie de prácticas de gobierno que se tradujeron en la exclusión de importantes grupos de la sociedad, los cuáles ahora tienen la oportunidad de recuperar la interlocución.
El presidente del Sindemex, consideró que el nuevo gobernador de Puebla está en la oportunidad de hacer los ajustes y cambios necesarios en su gabinete que garanticen un clima de gobernabilidad real.
Se trata, abundó, de no convertir a su administración en un rehén de grupos e intereses políticos que quieren repetir modelos del pasado que se basaron en la inequidad.
“Ese pasado incluso ha dejado a Puebla al margen de que cualquier riesgo provoque un escenario de ingobernabilidad; sobre todo el nuevo gobierno tiene que direccionarse en lo que respecta a la preservación del Estado de Derecho y la administración de justicia, a frenar la impunidad y la inseguridad pública”, añadió.
Refirió que no es casualidad que la percepción de inseguridad pública se haya disparado al grado que la entidad sea comparada con Tamaulipas y Guerrero.
Concluyó que además del impulso a un real Estado de Derecho y combate a la inseguridad, sin duda las elecciones serán parte de los focos de atención que se relacionarán con la gestión de Guillermo Pacheco Pulido, “a quien damos un voto de confianza en el sentido de que preservará la legalidad y equidad en los comicios que se desarrollarán”.
