Alto a la inseguridad, mejores salarios y respeto a la vida sindical, demandaron trabajadores durante la marcha conmemorativa al Día Internacional del Trabajo, este Primero de Mayo, que sumó por primera vez a sindicalizados de Audi México entre los 25 grupos que se manifestaron.
La movilización de los sindicatos independientes y de diversas organizaciones reunió a gremios de trabajadores de industrias de las ramas automotriz y autopartes, telecomunicaciones, educación, salud y organizaciones de la sociedad civil.
La columna de sindicatos independientes demandó freno a la precarización salarial, que la reforma laboral no ponga en riesgo la estabilidad de las fuentes de trabajo, desarrollo económico que genere crecimiento con justicia y equidad.
Líderes de los sindicatos independientes adheridos a la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) se pronunciaron por la autonomía sindical y porque se rompan los topes de aumentos salarial en el sector educativo.
El contingente integrado por trabajadores de Volkswagen de México, Monte de Piedad, Seglo, Teléfonos de México, del Sutissstep, Hospital del Niño Poblano, INAOE, BUAP, jubilados del IMSS, entre otros, partió de la 25 sur y Avenida Juárez, rumbo al zócalo de la capital poblana, donde exclamaron consignas contra la Reforma Laboral recién aprobada en tanto exigieron respeto a la vida sindical.
Marcharon por primera vez trabajadores de la empresa Audi México quienes con mantas exigieron a los tres niveles de gobierno atender el tema de inseguridad.
El líder del Sindicato Independiente de Trabajadores de la Industria Automotriz Volkswagen de México (Sitiavw), Rey David García Avendaño destacó que la reforma laboral recién aprobada ratifica la necesidad de una democracia sindical verdadera, por lo que llamó a las dirigencias a respetar la decisión de los trabajadores.
«Pero también debemos ser cuidadosos porque la llamada libertad sindical no se puede confundir con libertinaje, ni ser la puerta de entrada a grupos que desestabilicen la vida los sindicatos y de las empresas, debemos cuidar nuestros derechos, pero también nuestras fuentes de trabajo«.
Se pronunció porque la nueva ley federal del trabajo no sea un requisito del gobierno para la firma del nuevo Tratado de Libre Comercio entre México, Canadá y Estados Unidos, sino una oportunidad para sentar las bases de una nueva relación entre empresas, obreros y autoridades.