Miguel Barbosa, candidato a gobernador por Juntos Haremos Historia, lanzó una propuesta interesante. Eliminar el fuero a todos.
Este miércoles, apoyado por organizaciones de juristas que han analizado por semanas el marco jurídico local, anunció una reforma constitucional.
Sí, plantean quitar el fuero al gobernador, legisladores y magistrados. Pero la cosa no queda ahí. La reforma será a fondo y de largo aliento.
El orquestador del profundo análisis es el jurista Ernesto Ramírez, quien lleva un buen rato litigando, representando autoridades y asesorando instancias de manera magistral.
Ernesto encabeza un grupo de 100 especialistas en derecho, leyes, reformas constitucionales, violencia de género, violencia a niñas y niños, a indígenas, personas con discapacidad y derechos humanos, en un serial de foros municipales y regionales, arribaron a una conclusión que no tiene mañana, que no puede ni debe quedar en papel o únicamente en una memoria que vaya al “archivo del olvido”.
Y es que el reto es modificar, actualizar la Constitución de Puebla después de 100 años de que ha permanecido intacta.
La Reforma Constitucional implica derechos y protección a la ciudadanía, para todas y todos, niñas, niños –generación de infantes invisibles-, jóvenes, adultos, mujeres, indígenas y personas con discapacidad.
Y cuando hablamos de niños nos referimos a los niños que mañana serán adolescentes y que decidirán entre ser huachicoleros y traer coche del año a ir a la escuela y labrarse un futuro basados en el estudio y el trabajo. Es la diferencia entre estirar la mano y trabajar.
Reformar la constitución significa pasar de la simulación de un sistema de justicia penal que según es expedito y justo a un marco jurídico real, que puede garantizar la justicia absoluta a los gobernados.
Urgen modificaciones jurídicas, sí, para garantizar la justicia y erradicar la violencia y discriminación contra las mujeres pero sobre todo para anular la impunidad.
Impunidad que impera hoy.
Impera entre jueces y en general el poder judicial. Así es. Y habrá más, en breve.
Lo que viene es en serio. Y el tema llegó para quedarse.
Desde los corrillos:
Pero sólo se ha quedado en eso, puros sueños. Viejo autor de distintos desmanes en Texmelucan pero también en la capital donde si no le cumplen sus caprichos amenaza con cerrar calles y hacer manifestaciones para lograr su cometido.
Esta no es la excepción, ya que aunque en las últimas semanas la Secretaría General de Gobierno del Estado de Puebla y las autoridades del gobierno de la alcaldesa Norma Layón han venido trabajando en las mejoras del ordenamiento del comercio informal en el primer cuadro de Texmelucan, el señor Garzón sólo vela por sus intereses económicos.
Poco le interesa el bienestar de la ciudadanía, mucho menos se pone a pensar en que ante una emergencia las unidades responsables de atenderla, deben tener opciones viales para desplazarse de manera correcta.
Para eso han sido las diversas mesas de diálogo que se han desarrollado en Casa Aguayo, pero para el señor Garzón eso no vale. Lo que vale son los espacios que pelea en la vía pública para seguir llenando sus bolsillos.
Habrán que esperar el desarrollo del reordenamiento que atinadamente encabeza el gobierno de Norma Layón, y mientras tanto ir sorteando los berrinches y amenazas de Garzón quien ya anunció desde el Hotel Royalty que si no logra espacios entonces comenzará con manifestaciones en Puebla y Texmelucan, mismas que nos afectan directamente a todos los ciudadanos.
¿Y nosotros, los automovilistas, qué culpa de sus berrinches?
Por cierto que el líder ambulante de la Federación zona centro, Rubén de la Rosa, reconoció los trabajos de conteo que se realizaron gracias a las mesas de trabajos que se realizaron en el Gobierno del Estado.
Gracias y nos leemos el lunes.
Twitter: @erickbecerra1
Face: @erickbecerramx