¿Qué tan seguro se siente al salir y transitar por las calles de Puebla?
La situación que se vive en la capital poblana y la zona metropolitana es insostenible. Vivimos un momento de completa inseguridad, debido a que las autoridades no están haciendo su trabajo y nos han dejado como ciudadanos en un estado de desamparo y vulnerabilidad.
Y se tiene que asumir que la principal culpable tiene nombre y apellido: Claudia Rivera Vivanco, edil de la capital.
Rivera Vivanco llegó a la Presidencia Municipal no por méritos propios, sino por el efecto López Obrador, ya que en su currículum sólo destaca que fue presidenta de una comisión política en MORENA; digamos que se sacó la lotería sin comprar boleto, pero no sabe qué hacer con el premio.
Al inicio de su gestión había optimismo en su desempeño, sin embargo con el paso de los meses la alcaldesa ha demostrado inexperiencia, incapacidad y falta de personalidad, además de soberbia; lo peor es que se rodeó de un equipo con las mismas características.
Aunque muchos apostaban por un gabinete apartidista y lleno de expertos y profesionales, como el conformado por el Gobernador Interino, ella simplemente no se deja ayudar y hace oídos sordos a las críticas que buscan solo evidenciar la realidad que estamos viviendo.
El sábado pasado una madre perdió la vida tras un asalto, mientras se detuvo en una Farmacia Guadalajara, cuando iba camino a que su hija aplicara el examen para ingresar a la BUAP. Al mismo tiempo, Claudia Rivera publicaba fotos en sus redes sociales sonriendo al lado del Presidente Andrés Manuel López Obrador y después con el Gobernador electo, Luis Miguel Barbosa. Busca quedar bien con sus jefes políticos aunque nos quede mal a los poblanos.
La ineficiencia de la alcaldesa ha provocado que en el Congreso del Estado se formalice una solicitud para revocarle el mandato, abriendo la posibilidad de que sea alguien más quien asuma la responsabilidad que ella no ha podido cumplir y que nos ha puesto sobre las cuerdas, razón por la cual las y los poblanos tenemos miedo de salir a trabajar, a estudiar o a divertirse.
Es necesario reconocer sin fobias ni filias, que el tema de la inseguridad no es nuevo. Se trata de un cancer que encontró cabida desde la administración de Eduardo Rivera, pasando por la de Tony Gali y finamente con Luis Bank, sin embargo se ha desbordado como nunca en el pasado con la administración de Claudia Rivera.
Hoy, las propias bandas delincuenciales le han tomado la medida a la alcaldesa y han descubierto que no tiene ni idea de los que significa la estrategia.
Lo que sucedió el sábado no es cosa menor, una madre de familia asesinada mientras se detiene hacer compras en una farmacia a pesar de no oponer resistencia al asalto.
Debo confesar que ese mismo sábado yo acompañé a mi sobrina, quien también presentó su examen de admisión a la BUAP y casualmente me detuve también en una farmacia, lo que quiero decir es que todos somos vulnerables a esta inseguridad que nos rodea y que nadie hace nada por detenerla.