En desayuno de trabajo del Capítulo Puebla del Seminario Mexicano de Cultura, llevado a cabo este jueves 22 de octubre en “Casa Reina”, se invistieron dos nuevos integrantes: el arquitecto Sergio Vergara Berdejo (quien funge como Secretario de Cultura del estado de Puebla) y de la Dra. Daniela Calderón (directora general de Cultura). La ceremonia de investidura fue presidida por el Dr. David Villanueva Lomelí, el artista José Lazcarro Toquero, el escritor Miguel A. Pérez Maldonado, Fritz Glockner, Alberto Lozoya, Sary Bermúdez, entre otros.
#Puebla I Ingresan @sergio_berdejo y Daniela Calderón al Seminario de Cultura Mexicana (SCM), Capítulo Puebla
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— Síntesis Puebla (@sintesisweb) October 23, 2020
Homenaje póstumo a Gabriela Puente rinde el Capítulo Puebla del SCM
En reunión de trabajo, el Seminario de Cultura Mexicana Capítulo Puebla, previo a la inclusión de dos nuevos miembros, Sergio Vergara y Daniela Calderón, se guardó un minuto de silencio en homenaje a la poeta poblana Gabriela Puente, quien falleciera en esta ciudad el 22 de agosto de 2020.
Gabriela Puente —así la describió Miguel Ángel Andrade—, cuentan quienes se encargaron de esas labores, nació en este mundo sin haber llorado, tampoco hubo complicaciones de parto. Lo cual hace pensar que Gabriela tomó dicha paz como una afrenta personal y cobró venganza: se encargó de gritar al mundo las complicaciones que, el muy mustio, en verdad posee.”
Yo he dicho —mencionó en el homenaje, el también poeta Enrique de Jesús Pimentel—, y creo que lo he repetido varias veces, que su poesía, la de Gabriela, era una diatriba fogosa y vehemente que, al mismo tiempo, hace la repulsa y el panegírico del mundo.
Dicho poeta, quien presidiera el Taller literario en el que ella tuvo parte de su formación poética, agregó:
“Porque Gabriela Puente era una niña buena.
Era, sí, como se dice ahora, una niña bien.
Una niña, señoras y señores,
que una noche de primavera le abrió las puertas al mal.
Mejor dicho,
le cedió su voz a lo que todos decían que estaba mal,
porque sabía que aquello que le decían que estaba mal, estaba bien.
Porque sólo una convicción la guiaba:
que el amor no es una cáscara pulcra o deshabitada,
sino un estallido de honestidad y pasión insobornable.
Porque, señoras y señores, las buenas conciencias,
las mejores conciencias, nunca fueron tan buenas
ni mejores que ella”.
A continuación, Rocío Puente y Miguel Ángel Andrade leyeron algunos fragmentos de la poeta:
“Cuerpo del delito” (fragmento)
según fojas no mostradas por ser dogmas de fe
dios:
—en lo posterior llamado padre—
forzó al hombre:
—en lo posterior llamado pobrediablo—
a firmar contrato.
en el que ambas partes atestiguaron
que padre entregó el cuerpo a pobrediablo
para sobrepoblar el mundo…