Si en el 2018 hubieras podido ver el futuro y supieras de esta pandemia, ¿hubieras ahorrado en casa para cualquier imprevisto o gastos de salud? ¿Hubieras guardado para las vacas flacas de tu negocio?
La verdad es que el hubiera no existe, pero nunca es tarde para prever tu futuro, para comenzar un buen hábito de ahorro y planificación. Aunque creas que estoy loco, el que nos haya caído una pandemia no es sólo asegurar tener los recursos para cuidar de los tuyos en caso de contraer Covid; supongo ya te diste cuenta que este canijo bicho no discrimina y pega parejo en la cartera, los trabajos, las ventas…
En el ámbito que sea, es vital contar con un fondo de emergencia. Hoy, es una pandemia, mañana podría ser un sismo, una devaluación o malas decisiones “de ya sabes quien”.
¿Te doy un consejo? Ármate un presupuesto que se ajuste a lo que está ingresando a tu casa o negocio. Este confinamiento, mínimo a mí, me ha permitido darme cuenta de tantas cosas en las que gastaba y no son ni tantito necesarias. Tengo amigos que tuvieron que cerrar sus oficinas y hoy tienen un sistema home office que les funciona perfecto. Comienza a reducir tus pagos, esto representará una cantidad importante que se podrá destinar a tu ahorro.
“Oye Felipe, es que súmale lo que gastamos ahora en luz con el trabajo y la escuela en casa, está canijo.” Por supuesto que lo entiendo, más que la recuperación económica va a pasos hormiga. Si fuiste de los afectados y te redujeron tu sueldo, o tuviste que comprar dispositivos para tus hijos, tus colaboradores, meterle más lana para tener conectividad de calidad, entiendo que será más complicado ahorrar, pero de verdad siempre habrá una manera de hacerlo. ¿Te “sobraron” esta quincena 15 pesos? Ahórralos, por algo se empieza. Ya lo decía Benjamín Franklin: “Un centavo ahorrado es un centavo ganado».
Yo tengo un cochinito de barro, literal. Y cada que llega una moneda de 10 pesos a mis manos se la echo. Cuando esté lleno calculo que tendré unos 20 mil pesos. ¡Nada mal!
Pero ojo, ahorrar no es acumular. Cuando tengas una cantidad importante decide dónde quieres poner a trabajar tu dinero. Según Kork, un despacho de especialistas en asesoría patrimonial, de cada 10 mexicanos el 3.5 afirma generar un ahorro de manera formal. Si dejas tu ahorro debajo del colchón jamás te dará frutos. Investiga la inversión en la bolsa o los bitcoins. Para entrarle a este mundo no necesitas ser millonario, nomás tener visión.
Te invito a sentarte a hacer números. Y si en efecto te sobran esos 15 pesitos, ahórralos cada quincena. O es más, si logras hacerlo diario, y luego lo inviertes en acciones, en 10 años esta lana se podría convertir al menos en 100 mil pesos.
¿Te imaginas asegurar una vejez digna sin depender de nadie, sólo de ti? ¿Te imaginas no tener que tronarte los dedos para pagar la nómina? Mañana esos 15 pesos, créeme, serán tu mejor decisión.
Por Felipe Sandoval
www.felipesandoval.com