Personal de estancias infantiles en Tlaxcala demandó al gobierno de Andrés Manuel López Obrador no realizar recortes de hasta un 50 por ciento al presupuesto que se ejerce al programa de guarderías, que aún es operado por la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).
El grupo de educadoras y personal auxiliar se reunió la tarde de este jueves en el zócalo capitalino para realizar una marcha pacífica por el primer cuadro de la ciudad, en donde mostraron pancartas con consignas en contra del nuevo gobierno federal.
“Nos afecta en todos los sentidos ya que los niños son quienes más necesitan el servicio, padres de familia y nosotros como trabajadoras también salimos afectadas. Son alrededor de 300 estancias en todo el estado que se verían afectadas con el recorte”.
Actualmente cada estancia infantil recibe 950 pesos por niño a manera de subsidio, aunque el costo operativo suele ser mayor con base en el número de niños a los que se ofrece cobertura.
Asimismo, el costo que tienen que pagar los padres de familia es diverso el cual depende de cada estancia infantil, y los servicios que ofrezca.
En una estancia se pueden llegar a recibir hasta 40 mil pesos de subsidio por parte de la Sedesol, por lo que advierten que el recorte afectaría sustancialmente el gasto de cada guardería a reducirlo, por ejemplo, hasta los 20 mil pesos.
Las educadoras inconformes advirtieron que la demanda para no reducir el presupuesto en estancias será presentada a la representante en Tlaxcala del gobierno de la República, Lorena Cuéllar Cisneros, para que a su vez la externe al presidente.
De momento, descartaron que la advertencia en la reducción del recurso que reciben las estancias infantiles pueda afectar el servicio de momento, sin embargo, advierten que sería a partir de enero cuando se evidencie el recorte presupuestal.
A partir del recorte en el gasto para las guarderías adscritas a Sedesol, de acuerdo con Viridiana García, asistente de la Estancia Infantil Grandes Sonrisas de la comunidad de Santa María Texcalac, Apizaco, existe la posibilidad de que pudieran cerrar algunas instituciones debido al aumento en el gasto operativo, pero un menor presupuesto.
“Son gastos para nosotros, es inicio de año, es pagar impuestos, es dinero y más que nada para los alimentos de los niños”.
