Escrito por: María de Lourdes Hernández Rodríguez

Ranchería de Pocitos, es una localidad ubicada en el municipio de Atltzayanca, Tlaxcala, con una extensión de 4.66 km2, la cual para 2018 contaba con 1284 habitantes dedicados principalmente a la agricultura, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi, 2018).

Pocitos, además de los atributos que la identifican como una comunidad rural, tiene una característica que la hace especial: el manejo comunitario del agua para uso doméstico, puesto que, si bien, el recurso es extraído del pozo profundo que se encuentra en el centro de la población, la forma en que gestionan su aprovechamiento es particularmente excepcional y digno de difusión.

Si bien en Pocitos la responsabilidad de administrar el agua para consumo humano recae en el Comité Local de Agua Potable conformado por cinco personas: presidente, secretario, tesorero y dos vocales, cuyo nombramiento es emitido por la Asamblea General Comunitaria, una vez al año; el sistema de gestión como actualmente se aplica, inició hace 20 años con la decisión del presidente de comunidad de ese entonces, don Demetrio Morales, quien con una actitud visionaría y ante la limitada cantidad de agua disponible, ideo un sistema de racionalización para su equitativa distribución.

Es importante destacar que Pocitos se encuentra en una zona de escasez física, con una dotación anual de 61 mil 537 m3 de agua que es distribuida, mediante un sistema de tandeo, tres días a la semana, con un promedio de cinco horas diarias, la cual actualmente es regulada por nueve válvulas en igual número de cuadrantes desde 2010. Esto equivale a 613 litros diarios por casa.

Para prevenir la falta de agua al interior de los hogares, ésta se almacena en utensilios de cocina, tanques de plástico (de 250 a 500 litros) y/o cisternas (de mil 200 a 20 mil litros) dependiendo de las posibilidades económicas y necesidades domésticas de cada familia. Hasta aquí, nada novedoso en una comunidad rural; lo que hace especial a Pocitos, es la coherencia entre reglas de apropiación y provisión del agua; dichas reglas fueron delineadas en Asamblea Comunitaria a propuesta del PCAL a principios del 2010, estableciéndose que todo ser humano que habita en la comunidad, tiene la obligación de pagar el agua que consume, de forma tal que no se contabiliza la cantidad de agua consumida por persona, sino el número de habitantes por vivienda, por lo que en 2017 (año en que se realizó ésta investigación) cada persona pagaba una cuota anual de 135 pesos, no importando si se tratase de un recién nacido o un adulto mayor; dicha cantidad es saldable de contado o en pagos no fijos durante el transcurso del año.

Adicionalmente, esta misma regla se aplica al ganado mayor (bovinos, caprinos, ovinos y equinos), cuyos dueños deben pagar por casa animal, la misma cantidad que por persona, para el caso de otros animales domésticos, el agua se contabiliza dentro del consumo familiar, esto quiere decir que una familia con cuatro integrantes con y tres cabezas de ganado, paga anualmente mil 80 pesos de agua, para un consumo estimado de 152 mil 880 litros anuales.

Otra de las enseñanzas en materia de agua que nos presenta Ranchería de Pocitos, es su sistema de monitoreo y sanciones: diariamente se hacen rondines asignados por el presidente del Comité local de Agua Potable con el objetivo de vigilar las condiciones de la red de distribución que, aunque yace oculta, puede tener fugas, otro desperfecto o un moroso esté conectado a ella. Esto no exenta a los demás habitantes de auto-vigilarla, ya que están conscientes de que la red es propiedad de la comunidad y cualquier desperfecto implica un gasto, y cuando las reglas no se cumplen, las sanciones son de acuerdo al contexto y gravedad de la falta, y están relacionadas con el no pago de tarifa de agua. Si algún avecindado se retrasa o no paga, se cierra la válvula que abastece a toda la sección y entonces el resto de los vecinos le recriminan en su domicilio y públicamente, obligándolo a pagar.

Admitir la importancia de la Acción Colectiva es reconocer su utilidad en la Gestión del Agua en Ranchería de Pocitos. Esto deja constancia de la eficiente autoorganización en la administración y aprovechamiento del agua, pues existen acuerdos institucionales que la han favorecido en los últimos 20 años, entre las que destacan:

* Establecimiento de límites bien definidos, precisados por el polígono de la comunidad, por la cantidad de agua disponible y la distribución de ésta mediante cuadrantes, así como el establecimiento de tarifas fijas por persona y cabeza de ganado.

* Coherencia y respeto de las reglas de apropiación del recurso, que fija puntualmente: tarifas, formas de apropiación y sanciones.

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