A propósito de las manifestaciones pacíficas que se realizaron a nivel nacional por parte de las diferentes comunidades homosexuales o de género, el estado de Tlaxcala figura a nivel nacional por ser uno de los 14 que a la fecha no han legislado en torno al matrimonio igualitario.

Hace unos días, el congreso local del estado de Campeche legisló en la materia y se convirtió en el número 18 a nivel nacional que autorizó legalmente el matrimonio entre parejas del mismo sexo, objetivo que se persigue en varias entidades del país, entre ellas Tlaxcala.

Junto con la entidad tlaxcalteca, los estados de Durango, Guanajuato, Guerrero, Estado de México, Oaxaca, Querétaro, Sinaloa, Sonora, Tabasco, Tamaulipas, Veracruz, Yucatán y Zacatecas, no han legislado en torno al matrimonio igualitario.

Desde hace por lo menos dos legislaturas, diputados locales, sobre todo de izquierda, han promovido la legalización de los matrimonios igualitarios; sin embargo, al momento aún no hay avances que puedan advertir que Tlaxcala se convierta en la entidad número 19 en legislar al respecto.

El antecedente más cercano en torno al tema data de octubre de 2018, cuando fue presentada ante el Pleno del Legislativo local, una iniciativa que pretende legalizar a nivel local el matrimonio entre personas del mismo sexo.

Sin embargo, en julio de 2017, colectivos de las diversas comunidades y activistas de Tlaxcala presentaron una iniciativa ciudadana que buscaba reformar el código civil y legalizar el matrimonio igualitario.

No obstante, la iniciativa se envió a lo que popularmente se le conoce como “congeladora”, a partir de que ni en la fugaz legislatura anterior o en la actual, se ha mostrado interés por legalizar en la entidad este tipo de matrimonios.

Pese a esos antecedentes, en enero del 2016 de forma privada y en las instalaciones de la Comisión de Derechos Humanos (CEDH) se concretó lo que, a la vez, significó el primer matrimonio igualitario en Tlaxcala.

Ese matrimonio se concretó después de que una pareja de mujeres obtuvieron un amparo por la justicia federal, después de que la Coordinación del Registro Civil les negó la petición de unión matrimonial.

En tanto, un año después se realizó el mismo procedimiento en la CEDH, pero concretado por dos hombres que también consiguieron un amparo de la justicia federal para poder contraer nupcias y quienes permitieron la asistencia de medios para dar cobertura a un hecho inédito en la entidad.

Una de las principales demandas de la denominada comunidad lésbico, gay, bisexual, transexual, transgénero, travesti e intersexual (LGBTTTI), radica precisamente en legislar a favor de estos grupos, pero a la vez, que en todo el país se permita el matrimonio igualitario.

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