Texto y foto: Araceli Corona
Tras señalar que han dejado de recibir información y nota una “descoordinación” de las autoridades municipales con las estatales y aún más con las federales entre en torno a las fechas para la reapertura de negocios por la pandemia de Covid–19, el coordinador de la Asociación de Restaurantes, Cafeterías y Bares del Estado de Tlaxcala (Arbat), Abel Cortés Altamirano observó que hay “una gran descoordinación”.
A la fecha, dijo desconocer si Tlaxcala se regirá por la semaforización federal o tendrá su propio semáforo, incluso en los municipios la situación se observa totalmente diferente para la reapertura de los negocios de todos los giros.
“Oficialmente hemos dejado de recibir información, desconocemos si el gobierno estatal se regirá por la semaforización federal o si tendrá su propio semáforo. No es desconocido que cada ayuntamiento está aplicando también sus propios criterios para la apertura y cierre de establecimientos e incluso distintos horarios de apertura y cierre, a eso debemos sumar las medidas sanitarias impuestas para la apertura, las cuales varían entre las solicitadas por el gobierno federal, la Coeprist a nivel estatal y las direcciones de Protección Civil a nivel municipal”, lamentó.
Insistió en que existe una “descoordinación” entre autoridades y los empresarios y trabajadores del sector de alimentación “quedamos en la indefensión”.
Al cuestionarle por el número de empleos antes de la pandemia, apuntó que eran de 2 mil 500, eso era, en un cálculo promedio por empresa de 10 trabajadores correspondiente a los puestos de meseros, cajeros, vigilantes, cocineros, lavaloza, acomodadores de autos y auxiliares generales.
Sin embargo, todo se redujo al 50 por ciento, es decir, cinco o menos trabajadores por empresa. Tan solo entre los establecimientos afiliados a la Arbat el número de trabajadores representados venía siendo de 2 mil 500 hasta antes de la pandemia”, precisó.
Finalmente manifestó que las empresas afiliadas a la Arbat están desesperadas porque este miércoles se cumple una quincena más que deben cubrir los empresarios a sus trabajadores, y el acumulado de tres meses sin ventas.