En el marco del Día Mundial del Agua conmemorado este 22 de marzo, las Organizaciones Sociales Civiles (OSC) Coordinadora por un Atoyac con Vida, el Centro Fray Julián Garcés Derechos Humanos y Desarrollo Local A.C. y la Pastoral Social Tlaxcala y Pastoral de Derechos Humanos, replantearon su exigencia de “un río limpio y un entorno justo y humano”.
En el material audiovisual, señalan que el Río Atoyac antes era transparente, mientras que en la actualidad está gravemente contaminado. Con testimonios de habitantes de comunidades y municipios por donde atraviesa esta cuenca, evidencian el grado de contaminación, atribuida principalmente a la descarga de residuos industriales.
A través del video las OSC dan voz a personas que han atestiguado el deterioro ambiental y de la salud humana con el paso del tiempo, sobre todo en la región sur del estado de Tlaxcala. Como el caso de Esperanza Juárez, habitante de la comunidad de San Rafael Tenanyecac, quién refiere en el video que antes el agua era clara y en abundancia, “aquí corría el agua, bien bonita, limpiecita, no estaba estancada…hasta las piedritas del río bien bonitas…ahora eso ya no hay”.
#Tlaxcala | El Río Atoyac antes era transparente, mientras que en la actualidad está gravemente contaminado, denuncian organizaciones sociales.@gio_rosano pic.twitter.com/TSRjmy1MmP
— Síntesis Tlaxcala (@TlaxSintesis) March 22, 2021
En tanto, Luisa Varela, de San Mateo Ayecac, municipio de Tepetitla de Lardizábal, comenta que ella junto con sus primos jugaban en el río y pescaban; ya que asegura había acociles, mismos que los juntábamos y comían, sin embargo, ante la contaminación eso se acabó y por el contrario, el agua ahora ocasiona enfermedades, como insuficiencia renal.
En este mismo sentido, Pedro Flores, de San Rafael Tenanyecac; y Alberto Cano, subraya que el daño al río perjudicó todo y a quienes viven cerca de él. Finalmente Isabel Cano, reiteró que gran parte de la contaminación es a causa de los corredores industriales quienes dijo están desechando todo en el río, y mencionó que al instalarse estas empresas “empezaron a salir muchas enfermedades, la púrpura, cáncer de mama, uterino y del estómago”.
De esta forma, las OSC replantean su exigencia de “un río limpio y un entorno justo y humano”, pues “no hay justicia social sin justicia ambiental”.