El pastel selva negra es un clásico de la repostería en todo el mundo, sus orígenes son atribuidos a Alemania. La receta tradicional consiste en varias capas de bizcocho genovés de chocolate con nata montada y cerezas en  el interior, recubierta de nata montada y virutas de chocolate para decorar.

Una parte importante de del sabor de este pastel se debe a que el bizcocho se remoja en  lo que tradicionalmente se conoce como Kirsch un licor de cerezas bastante parecido a un brandy.

La primera mención de postre propiamente dicho dentro de un texto de cocina data de los años 30, su popularidad comenzó a crecer en la posguerra. Sin embargo hay dos historias respecto a como surge el pastel selva negra.

Aquella que goza de una mayor popularidad es la que atribuye el postre a Josef Keller dueño del café  Agner de Bad Godesberg quien inicio su negocio en 1915. La segunda sugiere que es una creación colectiva de la Selva Negra en la zona Montañosa de Baden-Wüttenberg, donde abundan las cerezas.

Al extenderse por todo el mundo su fama alcanzó tal nivel que países como Estados Unidos comenzaron a celebrar una conmemoración en honor a este postre que actualmente se conoce como El Día de la Torta Selva Negra que se tiene lugar cada 28 de marzo.