Como en muchos otros países México no cuenta con estadísticas exactas de sus producciones de biodiesel y a pesar de que en la entidad tlaxcalteca han existido comercios que surten dicho combustible también es un reflejo del panorama mundial ya que su consumo es muy bajo en comparación con otras alternativas.
Los biodiesel son una mezcla de esteres metálicos que pueden sustituir al diésel y que se obtiene de la reacción de aceites vegetales o grasas de origen vegetal. Debido a los riesgos a la sustentabilidad que podría representar la producción de biocombustibles si no se realiza de manera correcta se tienen legislaciones para certificar su calidad y producción. En territorio mexicano esta responsabilidad recae sobre la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Sin embargo es necesario recordar que este podría ser una gran opción para México, pues estimaciones revelan que en promedio al año se consumen mil 280 millones de litros de aceite de cocina y la mayoría termina siendo desechado de manera incorrecta lo cual genera grandes problemas para las plantas de tratamiento de aguas residuales.
Muchos defensores de la producción de estos combustibles señalan que su uso es incluso más viable económicamente para la población en general que la adquisición de automóviles sustentables, pero el debate en el país respecto al tema es muy amplio entre quienes se encuentran a favor y en contra, lo cual se suma a la poca información disponible y pocas legislaciones existentes hacen que el panorama de los biodiesel no sea claro.
A pesar del contexto que rodea los biodiesel a nivel mundial, cada diez de agosto se conmemora el Día Internacional del Biodiesel para recordar la primera vez que este combustible puso en funcionamiento un vehículo en 1893.
