En México el concepto de ‘niño de la calle’ tomó fuerza en los años 80 en gran parte por una campaña realizada por la UNICEF para visibilizar la situación de los infantes que trabajaban en el país.
A pesar de que en un principio se referían solamente a los que se encontraban dentro de una situación laboral, posteriormente se hizo referencia a aquellos que sumado al hecho de trabajar habían perdido todo contacto con sus vínculos familiares y en consecuencia se encontraban en las calles buscando sobrevivir.
Durante el 2019 existían tres millones 269 mil 395 niños y adolescentes en el país como mínimo en esta situación a pesar de que las instancias gubernamentales han implementado diversas herramientas con el claro objetivo de eliminar el problema, pero aun sin disponer de la capacidad suficiente para lograrlo.
Los datos sobre la población en situación de calle en México son poco exactos, pero se asegura que más de un tercio de la composición de este estrato social se encuentra compuesto por individuos de 18 a 30 años.
Una manera de que la sociedad visibilice la vulnerabilidad de la infancia que se ve forzada a hacer de la calle su hogar que es cada doce de abril se conmemore el Día Internacional de los Niños de la Calle.
La situación de calle en la infancia es sumamente delicada cuando se toma en cuenta que bajo esta condición se violan los derechos básicos de todo niño al no tener acceso a la salud, educación, alimento, bienestar psicológico y físico.
Lo cual deja a la vista la importancia de que los entes públicos, privados y la sociedad en general sume esfuerzos para el número de infantes en este tipo de ambientes disminuya.