Desde tiempos antiguos, las fases lunares han sido utilizadas para medir el tiempo
El mes de agosto comienza con una luna nueva el 4 de agosto de 2024, bajo el signo de Leo. Esta fase lunar marca el inicio de un nuevo ciclo y se asocia tradicionalmente con nuevos comienzos, la manifestación de intenciones y el impulso para concretar proyectos. La Luna nueva es el momento ideal para poner en marcha nuevos objetivos y focalizarse en los deseos y aspiraciones personales.
La influencia de la luna en nuestras vidas es significativa. Desde tiempos antiguos, las fases lunares han sido utilizadas para medir el tiempo, guiar la agricultura y la pesca, y entender las mareas. La Luna nueva, en particular, simboliza un nuevo comienzo y es un buen momento para realizar rituales que ayuden a conectar con nuestras metas y aspiraciones. Estos rituales pueden ayudar a concentrar la energía en lo nuevo, desde iniciar proyectos hasta trabajar en la autoconfianza y el crecimiento personal.
Durante agosto, los observadores del cielo podrán disfrutar de varias fases lunares: 4 de agosto (luna nueva bajo el signo de Leo), el 12 de agosto se apreciará cuarto creciente bajo el signo de Escorpio. Mientras que el 19 de agosto podrás deleitar tu noche con luna llena, conocida como la Luna de Esturión, bajo el signo de Acuario. Este nombre se debe a la abundancia de esturiones en los Grandes Lagos en esta época del año, según el Old Farmer’s Almanac. Y por último el 26 de agosto el cuarto menguante bajo el signo de Géminis.
Cada fase lunar ofrece una oportunidad para reflexionar y alinearse con las energías cósmicas. La Luna nueva es especialmente propicia para sembrar las semillas de nuestras intenciones y proyectos, aprovechando la energía creciente del astro para manifestar éxito y buen augurio en nuestras iniciativas.