Dentro del Archivo General de la Nación, se conserva la información de algunas de las primeras personas de origen chino que ingresaron al país de manera oficial durante la segunda mitad del siglo XIX, seis personas ingresaron por medio del Puerto de Guaymas, Sonora.
La migración de China a México, se intensifico durante la industrialización, pues gran parte de los chinos que llegaron fueron trabajadores y unos cuantos lograron establecer sus propios negocios independientes.
Una de las empresas que más dejó huella en este sentido fue la compañía del ferrocarril de Sonora, pero no fue la única, pues la empresa Inter- Ocean Railroad Company encargada de las obras del Ferrocarril de Tehuantepec utilizó mano de obra china.
Resultado del uso de personas de nacionalidad china para estos trabajos, una comunidad china empezó a asentarse en México. Por lo que no es de extrañar que en lugares como la calle de Dolores del Centro de la Ciudad de México mejor conocida como el Barrio Chino se unan a la celebración de año nuevo propia de esta nación y se le unan los mexicanos que conocen, respetan y adoptan a esta comunidad.
Para quienes conmemoran el año nuevo chino la festividad tiene una connotación muy importante, pues representa a los antepasados y es a la vez un signo de unión familiar. La celebración tiene como base el tradicional calendario lunisolar, por lo que este evento siempre tendrá lugar en la segunda luna nueva después del solsticio de invierno; correspondiéndole en esta ocasión el 29 de enero.