Fotografía: Imelda Medina/Síntesis

El especialista de Consultores Estratégicos Integrados de Raúl Rangel Romero, sugirió que de cara al escenario de crisis y la apuesta del SAT por mantener fiscalizadas a las personas físicas, se debe conocer la rentabilidad real de los negocios y optimizar impuestos.

En paralelo, cuidar el coeficiente de utilidad, analizar costos y gastos de sus entidades y economizar lo más posible, buscar alianzas con clientes y proveedores, así como con trabajadores para ahorro en sus remuneraciones.

Más allá de eso, buscar estrategias de optimización fiscal, pues el 70 por ciento de cada peso de sueldo se van en impuestos, contribuciones y carga social.

En ese escenario reconoció que empresas se han apostado por pagadoras de nóminas que eluden impuestos y pagos de seguridad social, pero con que demuestren que reportaron al Servicio de Administración Tributaria (SAT) sus aportaciones fiscales y las obligaciones en forma correcta.

Rangel Romero recordó que todos los causantes pueden incurrir en delitos penales fiscales.

Aún más, si hay alguien que sale en la lista negra y tuvo operaciones con un contribuyente, este tiene que pagar o de lo contrario incurrirá en un delito fiscal penal, dicho de otra forma, si se compraron facturas y se detectan cómo apócrifas se tendrá que demandar mercantilmente por incumplimiento del servicio a quien la generó y se desacredita el IVA que se pagó para liberarse del problema.

Añadió que existen siete círculos fiscales de control, desde el Artículo 69 B sobre las listas negras y persecución de contribuyentes, el Buzón Tributario, la Contabilidad Electrónica, la materialización de servicios o adquisición de bienes, la ley de lavado de dinero, discrepancia fiscal y operaciones relevantes.

Bajo la premisa de empresa pobre y empresario rico, el dinero está en las personas físicas, a las cuales se les fiscalizará más, sobre todo si no pueden justificar el origen de sus ingresos y patrimonio, abundó.

La finalidad del SAT es tener cada vez más control sobre las personas físicas, concluyó.