La historia de la humanidad es la historia de la lucha por sus derechos, de hacer frente a todos los intentos que van en contra de su reconocimiento. La historia está marcada de excesos y abusos por parte de las personas que están en el poder en contra los derechos humanos.

El transcurso del tiempo nos ha hecho reflexionar en torno a la necesidad de lograr su respeto, con el cual un mayor número de personas podrá tener un ejercicio efectivo de estos. Para ello es muy importante generar una cultura en derechos humanos los más amplia posible que pueda llegar al mayor número de personas en todos los rincones de nuestro planeta.

Cada sociedad y sus integrantes deben involucrarse, las personas de todas las edades y grupos tienen que sumarse al cumplimiento de este objetivo, porque la mejor consolidación de esta cultura es precisamente cuando de persona a persona se conocen y respetan sus derechos.

La trascendencia del respeto a los derechos humanos, como parte fundamental para su pleno ejercicio, ha sido objeto de análisis por la comunidad internacional, los grandes conflictos internacionales y también internos que se presentan en muchas naciones, han alertado la necesidad de salvaguardarlos mediante una protección efectiva, la cual comienza con su  respeto. En razón de ello, la Declaración Universal de Derechos Humanos del 10 de diciembre de 1948 estableció:

Como ideal común por el que todos los pueblos y naciones deben esforzarse, a fin de que tanto los individuos como las instituciones, inspirándose constantemente en ella, promuevan mediante la enseñanza y la educación, el respeto a estos derechos y libertades, y aseguren, por medidas progresivas de carácter nacional e internacional su reconocimiento y aplicación universales y efectivos”.

Esta conciencia de su respeto, también fue uno de los motivos que propició en nuestro País la reforma en derechos humanos a la Constitución Política en el mes de junio de 2011, la cual estableció a todas las autoridades “la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos”, lo cual se debe complementar con los deberes que le impuso al Estado  para “prevenir, investigar, sancionar y reparar las violaciones a los derechos humanos, en los términos que establezca la ley”.

Como podemos ver, el gran llamado a la sociedad y a las autoridades es involucrarse en la cultura por el respeto a los derechos humanos la cual se construye con una promoción y difusión efectiva de los mismos. Las personas deben saber cuáles son sus derechos y de que mecanismos disponen para hacerlos efectivos

El respeto es una parte indispensable para la convivencia armónica de un pueblo, para lograr una sociedad mejor.

Lic. Humberto Vieyra Alamilla

Visitador General de la CDHEH