“El mejor secretario de gobernación es el que no se ve, pero se siente”. Esta es una frase común entre la clase política, que reflexiona sobre cómo debe ser el perfil del jefe de Gabinete.

El caso de Diódoro Carrasco, secretario General de Gobierno de Puebla, parece encajar con ambas cualidades: “se ve”, es decir, se percibe su presencia en el gabinete, en los sistemas de gobernabilidad, y dado su peso en las decisiones, también “se siente”.

En agosto de 2004, el exsecretario de Gobernación federal esgrimió estos conceptos en una entrevista concedida a Proceso.

Este domingo, con la conmemoración del 150 Aniversario de la Liberación de Puebla y la entrega de la Gran Orden Victoria de la República a ciudadanos que han destacado por su alto sentido de patriotismo, Diódoro Carrasco demostró una eficiente capacidad de organización.

No sólo eso. Las fuerzas militares necesitan hoy más que nunca un asidero mediante el cual los ciudadanos puedan vincularse con orgullo y reconocimiento.

Además de las palabras en su discurso, Diódoro Carrasco editó un libro en el que se rescatan documentos y textos relativos con este pasaje de la historia del que pocos hablan, debido a la sombra que cubrió al gobierno de Porfirio Díaz.

Hoy que priva la coordinación entre las fuerzas militares y el estado en combate de delitos como el robo de combustible, hace mucho sentido el discurso a favor de la ley de seguridad interior que busca legitimar el uso de la fuerza cuando así se justifique.

Otro personaje que protagonizó hoy fue Luis Maldonado.

El diputado federal y presidente de la Academia Nacional de Historia y Geografía, instancia que reconoce con la Gran Orden Victoria de la República​ a Alejandro González Acosta, Consuelo Guerrero, Juan Ortiz Escamilla, Rafael Paz del Campo, Pedro Ángel Palou García, Miguel Ángel Porrúa, Carlos Tello Díaz, Juan Velázquez, Arturo Aguilar Ochoa, Moisés Rosas Silva, Ricardo Sodi Cuéllar, Antonio Campuzano y Ricardo Palmerín.

Destacado fue el discurso de Maldonado, quien resaltó la labor fundamental de las Fuerzas Armadas, “como las más sólidas, íntegras y vitales de nuestras instituciones”.

“Lo hacemos en un momento en el que se debaten criterios aislados que pretenden escatimarles un marco jurídico para el ejercicio legítimo de la fuerza que les ha conferido el Estado”, lo cual declaró como académico y como diputado federal en funciones.

Buen discurso, sin duda, cargado de una fuerte convicción en contra del populismo que cuestiona a las fuerzas militares.

 

Desde los corrillos:

Un llamado para el INAH es el que hacen habitantes de Huatlatlauca, quienes ponen en duda el rescate de los murales ubicados al interior del convento de Santa María de los Reyes.

Al parecer los trabajos que tendrían el apoyo de la asociación internacional World Monuments Fund no observan, aparentemente, las normas establecidas para preservar las obras de arte plasmadas en su interior.

Aquí una imagen de uno de los murales.

Gracias y nos leemos el miércoles.

Por lo pronto nos encontramos en Twitter en: @erickbecerra1