Tras englobar los desafíos que tiene el Colegio de Bachilleres para mejorar el perfil del egresado de sus estudiantes, el investigador del Instituto de Investigación en Matemáticas Aplicadas y Sistemas, José Luis Abreu León, afirmó que las ciencias exactas del siglo XXI suponen la vida cotidiana como un arte y un espacio de convivencia social.
Al disertar la conferencia “El Mundo es Matemático y los Seres Humanos también”, el especialista planteó que la asignatura de matemáticas sea vista como parte de la vida cotidiana.
Al interactuar con 400 alumnos de los planteles del Cobat de Chiautempan, Panotla, Ixtacuixtla, Texóloc y Tizatlán, Abreu León expuso, que es necesario reflexionar en torno a la aplicación y comprensión de las matemáticas en la vida cotidiana del ser humano, ya que, de esta forma, se podrán resolver asuntos personales y sociales.
A la vez sugirió a los estudiantes reunidos en la explanada de la Unidad Deportiva El Ranchito, utilizar la inteligencia y la creatividad para entender y comprender el uso de las matemáticas en su vida cotidiana.
Al tiempo, les recomendó usar la tecnología como herramienta de aprendizaje y les dio ejemplos como entrar al mundo matemático de los seres humanos, creando e interactuando para obtener aprendizajes que los hagan jóvenes de éxito.
Entre los ejemplos mostrados a los jóvenes destacaron los programas Descartes y Arquímedes, Pitágoras, donde hay contenidos educativos interactivos de matemáticas y que forman parte de la enseñanza de bachillerato.
También les explicó a los estudiantes, que uno de los problemas de aprendizaje que se vive en el mundo es la enseñanza de las matemáticas, ante la resistencia que hay por aprenderlas y los conminó a retomar un interés interactivo, y aplicarlas en la cotidianidad e identificarse con ellas.
A esta conferencia asistieron directivos del Subsistema Cobat, encabezados por la directora general, Silvia Josefina Millán López, quien agradeció el trabajo pedagógico que viene desarrollando el doctor José Luis Abreu León a favor de docentes y estudiantes al proporcionar contenidos de aprendizaje interactivo, útiles para adentrase a las matemáticas del siglo XXI.
Posteriormente, el fundador del Laboratorio de Innovación en Tecnología Educativa, se reunió con 85 docentes que imparten la asignatura de matemáticas del Colegio de Bachilleres de Tlaxcala, a quienes invitó a buscar el interés de sus alumnos por las matemáticas, desarrollándoles el pensamiento abstracto.
Les explicó que la resistencia de los alumnos para aprender matemáticas viene generalmente de cómo les enseñan y los exhortó a acercar el conocimiento matemático de forma interactiva y les enumeró formas de mejorar el aprendizaje de sus estudiantes.
Entre esas propuestas, refirió el uso de la pedagogía interactiva y les manifestó que como docentes deben presentar ejercicios con los que los alumnos se sientan identificados; mostrar el origen de la importancia cultural del tema a enseñar y contextualizarlo a la vida de los jóvenes; y aprovechar el entono social y tecnológico en el que viven e interactúan los alumnos.