TOKIO (AP) — Corea del Norte anunció el domingo que detonó una bomba termonuclear en su sexto y más poderoso ensayo nuclear hasta la fecha, un gran paso hacia su objetivo de desarrollar armas nucleares capaces de atacar en cualquier lugar de Estados Unidos. Pyongyang calificó su ensayo con una bomba de hidrógeno de “éxito perfecto”, mientras sus vecinos condenaron la explosión inmediatamente.
Aunque aún no se ha determinado la fuerza precisa de la explosión, la agencia meteorológica de Corea del Sur dijo que el estallido provocó un terremoto artificial que fue de cinco a seis veces más fuerte que los temblores generados por sus pruebas anteriores. Según informes, sacudió inmuebles en China y Rusia.
La prueba se realizó a las 12:29 pm hora local en el sitio Punggye-ri, donde Corea del Norte también ha realizado pruebas nucleares anteriormente. Los funcionarios de Seúl situaron la magnitud en 5,7, mientras que el Servicio Geológico de Estados Unidos dijo que fue de 6,3. El terremoto artificial más fuerte de las pruebas anteriores tuvo una magnitud 5,3.
La televisión estatal norcoreana emitió un boletín especial el domingo por la tarde para anunciar la operación. Dijo que el mandatario Kim Jong Un asistió a una reunión de la cúpula del partido gobernante y que firmó la orden de autorización.
Horas antes el domingo, el periódico del partido publicó un artículo de primera plana que mostraba fotos de Kim examinando lo que dijo que era una ojiva nuclear siendo colocada en la nariz de un misil balístico intercontinental.
El presidente estadounidense, Donald Trump, dijo el domingo en Twitter que las “palabras y acciones del Norte siguen siendo muy hostiles y peligrosas” para Estados Unidos. Calificó a Pyongyang de ser “una nación rebelde que se ha convertido en una gran amenaza y vergüenza para China, que está tratando de ayudar pero con poco éxito”.
China es por mucho el socio comercial más grande de Corea del Norte, pero Trump el domingo pareció ser más crítico con el presidente surcoreano Moon Jae-in, quien ha intentado acercarse a su vecino del norte.
“Corea del Sur está descubriendo, como les he dicho, que su charla de apaciguamiento con Corea del Norte no funcionará, ¡solo entienden una cosa!” tuiteó Trump.
North Korea has conducted a major Nuclear Test. Their words and actions continue to be very hostile and dangerous to the United States…..
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 3 de septiembre de 2017
Corea del Norte probó en julio dos misiles intercontinentales que se cree podrían llegar a territorio continental de Estados Unidos. Eso supondría un gran avance en los planes de Pyongyang, que afirma que su desarrollo de misiles forma parte de un esfuerzo defensivo para obtener la capacidad de lanzar ataques nucleares contra ciudades de Estados Unidos a modo de disuasión.
El gobierno chino expresó su “firme oposición y fuerte condena” al ensayo, según un comunicado del Ministerio chino de Exteriores. Beijing instó a Corea del Norte a “dejar de emprender acciones erróneas que empeoran la situación”.
Por su parte, el gobierno surcoreano realizó una reunión del Consejo de Seguridad dirigida por el presidente, Moon Jae-in. Moon estudiará todas las medidas disponibles, incluidas nuevas sanciones de Naciones Unidas o el despliegue de más activos militares estadounidenses, para aislar más a Pyongyang, según el director surcoreano de Seguridad Nacional, Chung Eui-yong.
El primer ministro japonés, Shinzo Abe, tachó la prueba de “absolutamente inaceptable”.
Se trata de la primera prueba nuclear norcoreana desde que Trump asumió en enero la presidencia de Estados Unidos. Trump ha respondido con una dura retórica a las redobladas pruebas de misiles de Pyongyang, incluso un comentario sobre fuego, furia y una fuerza nunca vistas si Corea del Norte continuaba con sus amenazas verbales.
Pyongyang aseguró que el dispositivo probado era un arma termonuclear, conocida como bomba de hidrógeno o bomba H. Verificarlo de forma independiente podría ser complicado. Corea del Norte aseguró que la prueba subterránea no había producido una filtración de material radiactivo, lo que haría aún más complicada la verificación.