Una corte japonesa ordenó este martes al gobierno y a la operadora de la central nuclear de Fukushima Tokyo Electric Power Co. (TEPCO) que paguen 500 millones de yenes (4.5 millones de dólares) a miles de antiguos residentes que reclamaron una compensación por haber perdido su medio de subsistencia en la crisis nuclear de 2011.

El gobierno no ordenó a TEPCO. que mejorase las medidas de seguridad pese a conocer al menos desde 2002 el riesgo de un gran tsunami en la región, según la Corte de Distrito de Fukushima.

El tribunal respaldó el argumento de los demandantes de que el desastre podría haberse evitado si el Ministerio de Economía e Industria hubiera ordenado a TEPCO que trasladara los generadores diesel de emergencia del sótano a terrenos altos y que hiciera los edificios del reactor a prueba de agua, basándose en datos de 2002 que sugerían un riesgo de tsunamis de hasta 15.7 metros (51 pies) de altura.

Los demandantes también habían alegado que TEPCO ignoró otra oportunidad de tomar medidas de seguridad cuando un grupo de estudio del gobierno en 2008 advirtió de que un gran tsunami podría dejar la planta sin electricidad.

El tsunami que golpeó la planta el 11 de marzo de 2011 desconectó de servicio el sistema de refrigeración de los reactores y destruyó los generadores de repuesto que podrían haberlo mantenido en marcha para mantener estable el combustible nuclear.

El gobierno y la empresa han afirmado que no podía anticiparse un tsunami de ese calibre y que el accidente fue inevitable.

Sin embargo, el fallo rechazó la petición de los demandantes de que se redujeran los niveles de radiación en sus antiguos barrios a los que había antes del desastre.

Los 3 mil 800 demandantes, que iniciaron el caso en 2015, son el grupo más grande de las aproximadamente 30 demandas similares pendientes en todo el país, y en las que participan 12 mil 000 personas.

Es el segundo veredicto que considera responsable al gobierno por el desastre en Fukushima, tras la decisión en marzo de la Corte de Distrito de Maebashi.