Grupos y cárteles del narcotráfico en México como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), el de Sinaloa, reductos de Los Templarios y el Cártel de Tijuana han encontrado nuevas formas de efectuar el tráfico de sustancias como la marihuana, metanfetaminas, cocaína y cristal sobre todo a Estados Unidos.

La estrategia de los cárteles ha pasado por ocultar los narcóticos en productos de diversa índole, tales como salsas, jugos, café, productos enlatados, botes de crema, alimentos y dulces típicos.

Además del trasiego, se realizan mezclas que luego pueden ser transformadas con procesos químicos en la Unión Americana, lo que ha generado un nuevo mercado con sustancias más variadas.

Según autoridades como la Policía Federal y la Secretaría de Marina (Semar) los principales aseguramientos ocurren en centrales de autobuses y aeropuertos en Tijuana, Jalisco, Ciudad de México, Michoacán y Guerrero.

La sofisticación de los cárteles se extiende a empresas de paquetería, a través de las cuales se realizan envíos pequeños con las sustancias a vender o modificar.

De diciembre de 2012 a junio de 2017, con el apoyo de binomios caninos de la Policía Federal se han realizado más de 2 mil aseguramientos en centrales, aeropuertos y retenes carreteros.

Las detecciones han sido de productos en las presentaciones más variadas; desde latas de chongos zamoranos o café, hasta cremas para la piel y otros productos de belleza.

Por otro lado, en varios puertos, elementos de la Marina han localizado cocaína y pseudoefedrina en tambos con, salsa de chile o sal mineralizada para ganado.

Cabe recordar que a principios de septiembre en Mexicali, Baja California, un hombre falleció por congestión generalizada de órganos vitales y edema pulmonar luego de beber un refresco, en el cual se halló disuelta una cantidad de metanfetaminas.