La explosión de un paquete bomba en una casa en Austin, Texas, provocó la muerte de un joven afroamericano de 17 años y dejó herida a otras dos mujeres, la cual ya está en recuperación en un hospital de la ciudad.

Hace 10 días se reportó el primer hecho de este tipo cuando un hombre de 39 años murió después de destapar una caja aparentemente con explosivos que dejaron en la puerta de su casa.

Los paquetes no se entregaron a través de ningún servicio de correo y ambos hogares son de personas de raza negra.

Estos hechos han provocado que las autoridades en Estados Unidos se mantengan alertas, por lo que llamaron a los ciudadanos a abstenerse de abrir correos sospechosos.

«Si ha recibido un paquete que se ha dejado en la puerta de su casa o en su patio o en la entrada de su casa y no lo esperaba o es de alguien que no conoce, llámenos»,  dijo el jefe de Policía de Austin, Brian Manley.

La policía local, así como agencias como el FBI y la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos están trabajando en la investigación.