Un “artefacto explosivo funcional” fue hallado en la casa de Hillary y Bill Clinton en Chappaqua, un suburbio de Nueva York, Estados Unidos, informó este miércoles un funcionario que pidió el anonimato.
Además, el Servicio Secreto descubrió un posible explosivo interceptado hoy en Washington, enviado al expresidente Barack Obama.
Los investigadores creen que el artefacto está vinculado con otro hallado el lunes en la finca del multimillonario George Soros.
La policía de New Castle, que tiene jurisdicción sobre Chappaqua, dijo que asistió al FBI, el Servicio Secreto y las autoridades del condado de Westchester en “la investigación de un paquete sospechoso”.
Ni Clinton ni Obama los recibieron ni estuvieron en riesgo de recibirlos debido a las medidas de seguridad que los protegen, dijo el Servicio Secreto en un comunicado.
La vocera de la Casa Blanca, Sarah Sanders, emitió un breve comunicado en el que condenó el hecho y puntualizó que el servicio secreto y las diversas agencias de seguridad de la Unión Americana ya investigan el hallazgo.
Minutos después, se evacuó de forma preventiva el edificio sede de la sede de la cadena CNN por la presencia de otro «paquete sospechoso».
Además de dicho artefacto y el hallado en la casa de los Clinton, la propia CNN reportó que se interceptó un paquete sospechoso dirigido a la Casa Blanca, mismo que fue condenado mediante un comunicado en algo que fue denominado como “intentos de ataques violentos” contra figuras públicas estadounidenses.
“Los paquetes fueron inmediatamente identificados como potenciales dispositivos explosivos durante un chequeo de rutina del correo y fueron procesado como tales”, informó el Servicio Secreto en una misiva.
“Los destinatarios no recibieron los paquetes y nunca estuvieron en peligro de recibirlos”, agregó.
[11:57 AM]
Nuevos paquetes sospechosos habían sido hallados en un edificio en San Diego, California, donde se encuentra el periódico San Diego Union-Tribune y el despacho de la senadora demócrata Kamala Harris.
No obstante, el portal RT señaló que en esta ocasión se trataba de objetos inofensivos, como libros, una pelota, zapatos e incluso una bolsa de papas fritas.
El incidente se produce horas después de que fueran interceptados paquetes con presuntos explosivos dirigidos a la excandidata presidencial Hillary Clinton y al expresidente Barack Obama.
