En medio de una serie de polémicas, Facebook decepcionó nuevamente a los mercados con sus resultados del tercer trimestre, tanto en su facturación como en su número de usuarios, y confirmó así la desaceleración de su crecimiento.
La red social generó un beneficio neto de 5.140 millones de dólares, una suma de 9% muy inferior al aumento de 31% alcanzado el trimestre anterior y la facturación de 13 mil 720 millones fue un poco menor de lo esperado.
Tras perder hasta un 3% en las transacciones electrónicas en Wall Street inmediatamente después de la publicación de los resultados, las acciones se recuperaron, avanzando un 1,22% a 148,1 dólares hacia las 21 H00 GMT.
En tanto, al 30 de septiembre, Facebook tenía 2,270 millones de usuarios activos mensuales (+10%), menos de los 2,290 millones esperados por los mercados que analizan cualquier signo de debilidad del titán tecnológico. A fines de junio, eran 2,230 millones.
El número de usuarios diarios también está por debajo de las expectativas, con 1,490 millones contra los 1,510 esperados.
La facturación de 13,720 millones de dólares implica un alza de 33% en comparación con el tercer trimestre de 2017, lo que confirma una desaceleración en el crecimiento, que había sido del 42% en el segundo trimestre.
El beneficio por acción, índice de referencia en América del Norte, se mantiene sin embargo en 1,76 dólares, muy por encima de las expectativas de los analistas.
Facebook se vio afectada por una crisis en el mercado bursátil a raíz de sus decepcionantes resultados trimestrales en julio, perdiendo 120 mil millones de dólares de capitalización de mercado en una sola sesión, algo sin precedentes en Wall Street.
El grupo está atrapado en controversias, particularmente por el manejo de datos personales desde el escándalo de Cambridge Analytica, polémicas que son dañinas para su imagen y probablemente alejarán al público y a los anunciantes.
El grupo también anunció recientemente que los datos de 29 millones de cuentas habían sido comprometidos por piratas informáticos, en un nuevo golpe a la confianza de los usuarios.
Asimismo, la empresa invierte tiempo purificando su red de contenidos dudosos y relatos de manipulación política, especialmente en el periodo previo a elecciones importantes, como las legislativas estadounidenses del 6 de noviembre.
El grupo ya había advertido que el gasto en seguridad y control de contenido pesaría sobre su rentabilidad. En el trimestre desembolsó 7,950 millones contra 5,200 millones en la misma época el año pasado.
Incluso antes de todos estos escándalos, la red advirtió en 2016 que su crecimiento exponencial se desaceleraría inevitablemente, especialmente porque ya está saturado de espacio publicitario. También es rechazado cada vez más por los más jóvenes.