Altos cargos de la Unión Europea descartaron este martes cualquier renegociación del acuerdo de divorcio entre Londres y Bruselas. La primera ministra de Gran Bretaña, Theresa May, inició una ofensiva para salvar el pacto de Brexit reuniéndose con líderes comunitarios en capitales europeas.
La dirigente británica inició la jornada con un desayuno de trabajo con su homólogo holandés, Mark Rutte, un día después de aplazar la votación del acuerdo en el parlamento británico para asegurarse los apoyos suficientes para sacar adelante el documento forjado tras más de un año de negociaciones con la UE, reconociendo que sería rechazado “por un margen significativo” en Londres.
Aunque Theresa May no hizo declaraciones en su reunión con Rutte en La Haya, el presidente de la Comisión Europea advirtió que el acuerdo del Brexit no está abierto a negociación en la cumbre que reunirá a los líderes comunitarios el jueves, aunque señaló que hay elementos que podrían aclarase.
“No hay lugar para la renegociación”, dijo Juncker a legisladores comunitarios en Estrasburgo, Francia, durante una reunión informativa sobre la cumbre.
Juncker, que se reunirá más tarde en el día con May, reiteró que “el acuerdo que hemos alcanzado es el mejor acuerdo posible. Es el único acuerdo posible”.
“Si se usa de forma inteligente, hay espacio suficiente para aclaraciones e interpretaciones adicionales sin la retirada del acuerdo”, agregó Juncker.
Theresa May en gira de “última hora” en Europa
Uno de los principales puntos de fricción desde el inicio de las negociaciones del Brexit ha sido como mantener el flujo comercial entre Irlanda del Norte, en Gran Bretaña, y la República de Irlanda, que forma parte de la UE, y May buscará la flexibilidad del resto de los socios europeos.
Pero Juncker dijo que la llamada “salvaguarda”, un mecanismo diseñado para asegurar que no haya una frontera en la isla de Irlanda una vez se materialice el Brexit el 29 de marzo de 2019, debe mantenerse, pese a que nunca fue pensada para utilizarse.