El expresidente de Egipto, Mohamed Morsi, el primero elegido de manera democrática, murió hoy en una corte mientras esperaba la conclusión de un juicio en su contra por presuntos cargos de espionaje, informaron medios locales.
En un reporte de última hora, la televisión estatal informó que el presidente Morsi quien gobernó entre los años 2012 y 2013, se había desmayado después de una sesión en la corte y después murió, sin dar mayores detalles.
Mohamed Morsi, surgido de la Hermandad Musulmana -un grupo islamista egipcio de gran tamaño y ahora proscrito- fue elegido presidente en 2012 en las primeras elecciones libres en el país tras el derrocamiento del dictador Hosni Mubarak.
Después, fue derrocado en julio de 2013 en un golpe militar liderado por el actual presidente, Abdel Fattah el-Sisi, y en los últimos años estuvo procesado bajo custodia por varios cargos, incluido el espionaje.
Mohammed Sudan, principal miembro de la Hermandad Musulmana en Londres, opinó que la muerte de Mohamed Morsi era un “homicidio premeditado” y aseveró que el exmandatario tenía prohibido recibir medicamentos o visitas y que había poca información sobre su estado de salud.
“Ha estado colocado detrás de una jaula de vidrio (durante los juicios). Nadie podía oírlo o saber lo que le ocurría. No ha recibido visitas desde hace meses o casi un año. Anteriormente, se había quejado de que no recibía sus medicamentos. Esto es un homicidio premeditado. Es una muerte lenta”, manifestó.