El presidente Andrés López lamentó la balacera y enfrentamientos armados del pasado sábado en Villa Unión, Coahuila; no obstante consideró el hecho una excepción, pues “no es algo que se padezca cotidianamente en ese estado”.
Durante su conferencia matutina, López afirmó que en la entidad y la región en común con Durango, la incidencia delictiva se ha reducido.
“¿Se acuerdan cómo estaba la situación en la Laguna, que tiene que ver con Coahuila y Durango, ahí bajó la incidencia? Ahí se aplicó un plan que ha dado buenos resultados y este caso es excepcional y no es algo que se padezca cotidianamente en Coahuila”, dijo.
López destacó la participación del gobernador de Coahuila, Miguel Riquelme.
“Quiero comentarles que no había pasado esto en Coahuila, ya llevaba tiempo. El gobierno estaba cuidando mucho el tema de la seguridad pública, es de los gobernadores, el de Coahuila quien más atención le dedica al tema de seguridad”, dijo.
Al respecto, Riquelme informó esta mañana que subió a 22 la cifra de muertos por los hechos ocurridos el sábado y que ya hay dos detenidos.
Ayer, el Centro de Mando para coordinar el despliegue de fuerzas para la captura del grupo que ejecutó el atentado en Villa Unión, informó que durante la madrugada fueron abatidos otros siete delincuentes.
Los elementos de seguridad mantienen el despliegue de búsqueda por tierra y aire en toda la región tras el ataque del sábado, por lo que durante las primeras horas del domingo localizaron a dichos delincuentes, quienes se daban a la fuga por el camino conocido como “La Brecha del Gas”, que conduce a los límites con el municipio de Anáhuac, Nuevo León.
A través de un comunicado, el Centro de Mando en la entidad señaló que a los sujetos les fueron aseguradas tres camionetas más, escopetas, armas y cartuchos.
“El gobierno de Coahuila sigue coordinando el operativo mediante el que se barre toda la región, y en el que además del despliegue por tierra en carreteras, caminos y brechas, sigue la búsqueda vía aérea con dos helicópteros”, indicó.