Arabia Saudí prohibió a sus ciudadanos y residentes realizar la peregrinación musulmana a La Meca por temor al contagio del coronavirus.
La agencia noticiosa estatal Saudi Press Agency transmitió el anuncio de un funcionario del ministerio del Interior, al que no identificó.
La semana pasada, el reino prohibió el acceso de peregrinos extranjeros a los lugares santos del islam. Miles de musulmanes ya viajaban hacia el reino y millones más se aprestaban a hacerlo durante el mes de ayuno del Ramadán y la peregrinación anual, el hajj.
Irán canceló las oraciones del viernes en todas sus capitales de provincia ante la propagación de un nuevo coronavirus, dijo el miércoles la televisora estatal.
El viernes es el principal día de oración en el islam, y tradicionalmente es un evento importante para los líderes religiosos de la República Islámica. La capital, Teherán, y otras zonas ya habían cancelado las plegarias la semana pasada a consecuencia del brote.
Irán anunció antes en el día que el COVID-19, la enfermedad causada por el virus, dejaba 92 fallecidos entre los 2.922 casos confirmados en toda la nación. Esta es la cifra de víctimas mortales más alta en el mundo solo por detrás de China, donde se registró el brote el pasado diciembre.
El portavoz del Ministerio de Salud, Kianoush Jahanpour, anunció las nuevas cifras en una conferencia de prensa en la capital. Irán supera ahora en decesos a Italia, foco de otro importante brote que también se ha agravado.
En Oriente Medio hay ya más de 3.140 casos de coronavirus, y la mayoría de los registrados fuera de la República Islámica están ligados al país.
El virus ha infectado también a altos cargos del gobierno civil y de su teocracia chií. En Irán, el virus ha afectado al gobierno más que en ningún otro país, incluido China, el epicentro del brote. En todo el mundo, hay más de 90.000 personas con COVID-19, que ha causado más de 3.100 fallecidos.
Los expertos temen que Teherán esté declarando una cantidad de casos menor a la real.
“El virus no tiene alas para volar”, señaló Jahanpour. “Nosotros somos los que lo transferimos de unos a otros”.
Durante una intervención en una reunión de su gobierno el miércoles, el presidente del país, Hasán Ruhani, reconoció que el virus está presente en casi todas las 31 provincias del país.
“Esta enfermedad está muy extendida”, dijo según una transcripción. “Abarca casi todas nuestras provincias y es, en cierto sentido, una enfermedad global con la que muchos países del mundo se han infectado, y debemos trabajar juntos para abordar este problema lo más rápido posible”.
Por otra parte, el viceministro de Salud de Arabia Saudí, Abdel-Fattah Mashat, dijo también el miércoles que los grupos que visiten La Meca desde otras partes del país tendrán prohibido realizar un peregrinaje conocido como umrah, según fue citado por la web de noticias Al-Yaum, ligada al estado. Estos grupos, de gran tamaño, suelen estar formados por residentes en el extranjero. Particulares y familias del reino pueden seguir visitando la ciudad.
La semana pasada, Arabia Saudí cerró los dos lugares más sagrados del islam _ La Meca y Medina _ a los visitantes extranjeros por el coronavirus. Esto alteró los planes de miles de musulmanes que ya se dirigían al país y podría afectar a millones más durante el mes sagrado del ayuno, el Ramadán, y el peregrinaje anual del haj, previstos para más adelante en el año.