Unas 190 mil personas podrían morir de covid-19 en África en el primer año de la pandemia y la enfermedad podría “estar latente” en el continente durante años, advierte la Organización Mundial de Salud.
Hasta 44 millones de los mil 300 millones de habitantes del continente podrían contagiarse en el mismo período, estima la agencia de salud de la Organización de Naciones Unidas (ONU), basada en su modelo de predicción para 47 países africanos.
Pero el número proyectado de infecciones y muertes se basa en la presunción de que no se toman medidas de contención. En realidad, 43 países africanos han implementado medidas para reducir la diseminación de la enfermedad, desde cuarentenas nacionales hasta restricciones en ciudades grandes y toques de queda, cierres de escuelas y prohibiciones de congregaciones públicas.
Más de 52 mil infecciones confirmadas y 2 mil 74 muertes por el virus han sido reportadas en países africanos, de acuerdo con cifras dadas a conocer el viernes por los Centros de Control y Prevención de Enfermedades en África. El total de casos ha subido por más de 42 por ciento en la última semana.
La enfermedad parece estar propagándose más lentamente en África que en Europa, de acuerdo con el reporte de la OMS. Funcionarios dicen que eso podría deberse a medios de transporte menos desarrollados o mal monitoreo.
“Aunque el covid-19 casi seguramente no se diseminará de manera tan exponencial en África como en otras partes del mundo, es muy probable que permanezca latente en los ejes de transmisión”, dijo la doctora Matshidiso Moeti, directora regional de la OMS para África, que reside en Brazzaville, República de Congo. Dijo que los brotes casi seguramente alcanzarán su ápex un mes después que el virus comience a diseminarse en comunidades.
“El covid-19 podría volverse habitual en nuestras vidas durante los próximos años a menos que muchos gobiernos en la región adopten un enfoque preventivo. Tenemos que hacer pruebas, rastrear, aislar y tratar”, dijo Moeti en una videoconferencia.
Con una población en su mayoría menor de 20 años, África podría estar experimentando una tasa de transmisión más lenta, casos menos graves y menos muertes de un virus que tiende a ser más grave en los ancianos.