El Gobierno de México reportó este domingo 2.764 casos más de COVID-19 y 218 muertes adicionales de personas afectadas por dicha enfermedad, y acumula así un total de 68.620 contagios y de 7.394 decesos con nuevos focos rojos en el sur del país.
Con la cifra de nuevos casos de las últimas 24 horas, que suponen un incremento del 4,2 % respecto a la jornada anterior, México suma once días consecutivos con registros superiores a los 2.000 contagios, tras romper el récord diario el sábado, cuando registró 3.059.
Uno de cada cinco casos, el 20,76 %, están activos, lo que significa que 14.247 personas han presentado síntomas de COVID-19 en las últimas dos semanas, precisó José Luis Alomía, director general de Epidemiología de la Secretaría (ministerio) de Salud mexicana.
Aunque Ciudad de México concentra más de un cuarto de los contagios activos, con 3.819 y un índice de casi 45 por cada 100.000 habitantes, Alomía resaltó también la situación en Tabasco, estado del sureste del país, con 641 pacientes y la segunda tasa más alta, de poco más de 25 casos por cada 100.000 personas.
En tanto, el estado sureño de Guerrero es la entidad territorial mexicana con mayor ocupación hospitalaria, al tener casi ocho de cada 10 camas ocupadas, el 79 %, por encima del 71 % de Ciudad de México.
Aunque Guerrero solo tiene 293 casos activos, y se sitúa en el decimoséptimo lugar nacional, su escasa infraestructura la ha llevado a la saturación.
En Acapulco, popular ciudad balneario del estado, el Ayuntamiento ha creado 300 fosas públicas por el incremento de casos de COVID-19.
A nivel nacional, la ocupación de camas de hospitalización para la red de infección respiratoria aguda grave (IRAG) se mantiene en el 38%, indicó Alomía. Eso significa que hay 9.779 camas ocupadas y 14.072 disponibles en 753 hospitales.
La ocupación nacional de camas con ventilador, o de terapia intensiva, permanece en el 34%.
En ese aspecto, Ciudad de México está en el primer puesto, con dos de cada tres respiradores ocupados, el 67%. Le siguen el Estado de México, con un 64%, Baja California con 61%, Chiapas con 54%, Guerrero y Veracruz, ambos estados con el 45%.
EL GOBIERNO PREPARA LA REACTIVACIÓN PARA EL 1 DE JUNIO
Pese a este panorama, el Gobierno mexicano prepara para el 1 de junio la «nueva normalidad», un plan económico que arrancó de forma parcial esta última semana en 300 «municipios de la esperanza», demarcaciones sin COVID-19 que además no colindan con territorios con contagios.
Este plan, que implica un semáforo de cuatro colores para definir la actividad económica permitida por cada entidad, comenzará a aplicarse a nivel nacional el 1 de junio.
Sin embargo, Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, recordó que esta semana sigue vigente la Jornada Nacional de Sana Distancia, es decir, la política de confinamiento del Gobierno federal, que no expirará por completo.
«No se quitan las restricciones de movilidad o de funcionamiento en el espacio laboral, educativo y en general el espacio público en todos los lugares del país y en una forma uniforme, eso debe quedar extraordinariamente claro», advirtió López-Gatell.
Horas antes, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, presumió de los efectos de las medidas adoptadas por su Gobierno.