El dictador de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró que cancelar la orden de expulsar a la embajadora de la Unión Europea (UE) en Caracas fue «lo mejor, lo más inteligente» y favorece «que el mundo escuche la verdad» de su país, pese a que la decisión fue tomada y comunicada por el propio mandatario hace tres días.

«Me parece que es lo mejor, lo más inteligente, lo apropiado y además lo que se corresponde con lo que buscamos, que el mundo escuche la verdad de Venezuela, que la Unión Europea entre en otro entendimiento y que haya una rectificación profunda, histórica, sobre el papel que la UE ha jugado con Venezuela«, afirmó Maduro en un acto de ascenso de militares.

Este mismo jueves, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Venezuela y el servicio de Acción Exterior de la UE emitieron un comunicado conjunto en el que anunciaban que el país suramericano había decidido «dejar sin efecto» la decisión de expulsar a la embajadora Isabel Brilhante Pedrosa.

La expulsión la anunció Maduro el pasado lunes y debía llevarse a cabo en un máximo de 72 horas, que se cumplían este jueves, como respuesta a las sanciones impuestas por la UE contra once funcionarios venezolanos por su papel en lo que considera “actos y decisiones contra la democracia y el Estado de derecho” en el país.

La embajadora había aplazado su salida hasta el sábado ya que no había vuelos regulares programados debido a la pandemia de covid-19.

Para tomar la decisión de suspender la expulsión, Maduro explicó que el canciller, Jorge Arreaza, le informó el martes que había sostenido una conversación con el Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, que calificó como «tensa» y «dura«.

En ella, según explicó el mandatario, Arreaza hizo «un reclamo sólido sobre la ilegalidad y la injusticia de esas sanciones pretendidas«, que por el momento se mantienen.

«Surgió la idea de tomar el camino del diálogo político y diplomático de la Unión Europea y el Gobierno venezolano. Elevar el nivel del diálogo, profundizar y dinamizar el diálogo directo entre Borrell y Arreaza«, a la vez que se hizo la propuesta de suspender la expulsión, detalló el sátrapa.

Acerca del reconocimiento del líder opositor Juan Guaidó como presidente interino de Venezuela por parte de 24 países de los 27 que componen la UE, el canciller destacó que el comunicado «habla por sí mismo«, puesto que considera que «es una señal clara en términos diplomáticos de reconocimiento» al régimen de Maduro.