El gobierno de Reino Unido anunció un plan para combatir el sobrepeso ante los daños que genera el covid-19 en personas con esta comorbilidad; además, se limitarán los anuncios de comida chatarra, se detallarán cifras de calorías en menús y se fomentará el uso de la bicicleta.

Las nuevas medidas surgen en medio de los señalamientos de un estudio según el cual la obesidad fue una de las principales agravantes en la muerte de 45 mil personas por el coronavirus.

Sabemos que la obesidad aumenta el riesgo de enfermedades graves y de muerte por coronavirus, por eso es vital que tomemos medidas para mejorar la salud de nuestra nación y proteger al Servicio Nacional de Salud (NHS)”, dijo este lunes el ministro de Salud, Matt Hancock.

Asimismo, se impulsará la campaña “Con mejor salud”, con la cual se “instará a las personas a adoptar un estilo de vida más sano y a perder peso si lo necesitan”.

En un comunicado, el gobierno del Reino Unido advirtió los riesgos de “la bomba de relojería que es la obesidad”.

De inicio se prohibirá en televisión y en línea la publicidad de comida chatarra antes de las 21 horas, ya que es el horario en el cual “los niños son más susceptibles de estar expuestos a ella”.

Asimismo, los restaurantes y cadenas de comida para llevar con más de 250 empleados estarán obligados a informar del número de calorías de sus menús.

Además, los supermercados también tendrán que poner fin a los descuentos en la comida chatarra y no podrán colocarla “en lugares clave de sus establecimientos, como delante de las cajas registradoras o en la entrada”.

También se amplían los servicios del NHS dedicados a la pérdida de peso y se insta a los médicos de cabecera a «prescribir el ejercicio físico» a los pacientes.

Lo último, según revelaron fuentes de Downing Street a la agencia AFP, esto podría concretarse en proyectos piloto con “sesiones de bicicleta”.